Se registraron tres casos nuevos de dengue en Chiapas durante la última semana con corte al 17 de agosto.
La Dirección General de Epidemiología a través del Panorama Epidemiológico de Dengue 2020, dio conocer que en la semana del 10 al 17 de agosto se generaron tres nuevos caso de dengue en el estado.
Los municipios más afectados son Acala, Ostuacán, Pichucalco e Hixtacomitán.
A raíz de estos contagios, se establecieron campañas de prevención y descacharramiento de casas, parques y calles, además se intensificaron las acciones de control larvario y entrega de abate en varios municipios del estado.
En lo que va del 2020, se han registrado 146 casos positivos de dengue en la entidad y afortunadamente, no se han registrado fallecimientos.
Durante esta época del año, se exhorta a la población a atender las recomendaciones sanitarias para prevenir el dengue, zika y chinkungunya, padecimientos que se caracterizan por síntomas similares al Covid-19, tales como fiebre, dolor de cabeza y dolor de articulaciones.
De esta forma, la Secretaría de Salud Municipal de Tuxtla Gutiérrez, informó los resultados de la reciente campaña de descacharramiento, recolección de escombro y pendones, realizada este fin de semana en las colonias Plan de Ayala, Terán, San José Terán, Ampliación Terán y La Reliquia.
Inserta dentro del programa integral “Limpiemos Tuxtla”, este tipo de campañas tienen la finalidad de evitar la proliferación de mosquitos y prevenir enfermedades transmitidas por vectores, además de generar consciencia entre la población para evitar acumulamiento de materiales que puedan convertirse en criaderos de mosquitos.
En este sentido, se informó que, durante dos días consecutivos, las diversas brigadas recolectaron un total aproximado de 93 toneladas de cacharros; 1,113 llantas inservibles y unas 217 toneladas de escombro; además de 163 toneladas aproximadas de material pétreo y otros residuos durante el desazolve de tramos específicos del río Sabinal.
Con estas labores, el Ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez fortalece acciones contra el dengue, zika y chikungunya, además de generar un impacto ambiental positivo, al evitar que estos materiales inservibles sean desechados inadecuadamente, o en su caso como los pendones, generen una mayor contaminación visual y urbana.
Finalmente, también se contribuye con una ciudad más limpia y se evitan muchas situaciones de riesgo para la salud y la integridad física de la población.
