César Trujillo
Al senador y gobernador de Chiapas con licencia, Manuel Velasco Coello, y a su equipo de asesores, repito, si es que existen, les ha dado por inventarse un mundo alternativo. En su historia, el Güero es el héroe y todos lo quieren: exigen regrese, que no defraude “las confianzas”, que dé la cara y termine “su mandato”. Montan escenarios dignos de un meme mal elaborado, como en el que un grupo de indígenas de Santiago El Pinar porta una manta que muestra lo que este sexenio ha sido: un chiste que se cuenta solo.
Y es aquí donde uno no sabe si ponerse a reír o llorar con esos personajes encargados del montaje. Porque debemos señalar que no sólo es risible el acarreo que hicieron en defensa de Manuel, sino la pésima distribución de las mantas que no cuidaron fueran acorde al mensaje y, peor aún, el engaño con el que trajeron a la gente a la que se les adivinaba en el rostro el desconcierto y la pena.
Mire que poner a sujetar una manta que decía “Tus mujeres Güerito…” a un grupo de indígenas tsotsiles que, desorientados, sin tener el contexto real de lo que ocurría, fueron usados y exhibidos en las redes sociales. Mire que seguir utilizando a los pueblos originarios y a las familias de las zonas marginadas para buscar curar de salud a un gobierno que es el peor que ha tenido en su historia Chiapas, y que sigue empecinado en no soltar hueso pese a que lo han criticado fuertemente a nivel nacional.
Quienes piensan que difundiendo un mensaje de ciertos sectores invocando a Manuel Velasco están logrando algo, se equivocan. Lo mejor sería que dejaran al ahora senador en su curul guardadito y que le digan que muestre tantito respeto por las leyes de nuestra Constitución Política.
Porque debemos señalar que ya es suficiente el daño que le ha ocasionado la frivolidad de este sexenio a Chiapas, donde sólo sus funcionarios ven avances en un estado que se hunde en la ignominia.
Ya suficiente se ha dicho sobre la complicidad del Congreso local. Suficiente, también, se le ha señalado a Velasco su apatía. Pero lo de hoy, lo de utilizar a personas inmersas en la marginación para ponderarse como un gobernador que fue cercano a la gente y que es querido, ha sido la gota que derrama el vaso.
Quienes le hablan al oído deberían señalar que en Chiapas no se le quiere, que estamos preocupados porque impusieron a un político sin tablas para ese puesto como Willy Ochoa, sí, pero que sabemos que si aguantamos casi seis años de apatía con Manuel, podemos soportar unos meses más con los malos chistes y la soberbia de lord “Empantalónate”.
Es más, ya díganle al gobernador con licencia que no tiene las mujeres que dice tener en Chiapas y que todo es parte de ese juego que desde hace muchísimo tiempo surgió con el paternalismo, sin exclusividad alguna, y que eso quedó demostrado con ese grupo de varones indígenas que sostuvieron su manta mostrando la realidad que ha sido este gobierno del Partido Verde Ecologista de México en nuestro estado: un desastre total.
Hoy somos testigos de este absurdo que es la política en la aldea. Los manuelistas siguen con el zangoloteo jugando al tío Lolo, creyendo que no tenemos en claro que lo único que esperamos ahora es que este gobierno se acabe y que el que llegue cumpla con las altas expectativas prometidas y borre este sexenio que ha sido más una tragicomedia que otra cosa.
Y eso sí, no le quitemos la vista de encima al senador Velasco Coello. Sus cotos de poder tienen divisas que no esperábamos y en una de esas, en seis años más, lo podemos ver arañando un hueso más con ese rostro pálido que lo caracteriza.
Por lo pronto, señores asesores, entiendan que los espejitos que venden están ya tan oxidados que nadie se los compra. Yo mejor me quedo con la manifestación de la tarde frente al Congreso y coreo lo mismo: Que Manuel no regrese y si lo hace que sea lo que se robó. ¡Paf!
Manjar
Conocí al buen Fernando Gutiérrez en Cuarto Poder allá por el 2007. Fuimos compañeros de trabajo: él desde Deportes y yo en la sección Política. Pocas veces coincidimos por los horarios que no empatan, pero muchas veces nos detuvimos en el pasillo de la empresa a intercambiar ideas o a simplemente compartir un chascarrillo; a hablar de la situación del país, de nuestros equipos o simplemente de cómo nos iba en el trabajo. Hoy me entero de su partida y no pude evitar evocar su recuerdo. Descansa en paz, hermano. Que la familia encuentre la paz #DescanseEnPaz // “No es tarea fácil dirigir a hombres; empujarlos, en cambio, es muy sencillo”, de Rabindranath Tagore.#LaFrase // La recomendación de hoy es el libro La resistencia de Ernesto Sábato y el disco Master of Puppets de Metallica. // Recuerde: no compre mascotas, mejor adopte. // Si no tiene nada mejor qué hacer, póngase a leer.
* Miembro de la Asociación de Columnistas Chiapanecos.
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