* Los afectados consideran que esta decisión representa una carga económica adicional, ya que deben enfrentar altos costos operativos, como impuestos y alquileres.
Redacción / Alfaro Noticias
En el municipio de Tapilula, comerciantes de diversos giros comerciales han mostrado su rechazo hacia la reciente medida implementada por el alcalde Rosemberg Díaz Utrilla, quien ha determinado un cobro anual de 25 mil pesos a todas las personas físicas y morales que realicen actividades comerciales en la localidad. La imposición, según los afectados, representa un grave golpe económico para aquellos que ya enfrentan altos costos operativos, como el alquiler de locales y el pago de impuestos.
El cabildo municipal aprobó esta medida bajo el argumento de regular y supervisar la actividad comercial en el municipio. Sin embargo, la decisión ha sido catalogada como un abuso por parte de los comerciantes, quienes aseguran que el nuevo cobro es una forma de aprovechar el cargo para beneficio personal.
En entrevistas con los afectados, muchos aseguran que ya luchaban con dificultades económicas debido a los altos costos de renta de locales, y ahora deben sumarle este nuevo cobro anual que consideran injustificado. La protesta se ha centrado en que la imposición no se corresponde con una verdadera necesidad de regular el comercio, sino que más bien parece estar dirigida a aumentar los fondos del ayuntamiento a costa del esfuerzo de la comunidad trabajadora.
Este cobro no es una novedad total para el municipio, pues algunos recordaron que, en la administración anterior, el entonces alcalde Rosemberg Díaz Sánchez había intentado medidas similares, pero éstas fueron detenidas.
Los empresarios locales han manifestado que buscarán todos los recursos posibles para revertir esta medida. Se ha comenzado a organizar una serie de protestas y se han solicitado reuniones con las autoridades locales para exigir la revocación de este cobro, que consideran lesiona gravemente sus intereses y su capacidad de sobrevivir en un entorno económico ya complicado.
Ante la creciente indignación, los comerciantes de Tapilula han dejado claro que no permitirán que esta situación afecte aún más su estabilidad financiera y que continuarán luchando por sus derechos ante lo que consideran una decisión arbitraria e injusta.
