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Sin prisa y sin pausa / La Feria

Sin prisa y sin pausa / La Feria
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Sr. López

 

El sábado pasado fue el cambio de Poder Ejecutivo en el estado de Chiapas, en  presencia del Presidente de la república y los demás que tenían que estar y estuvieron. Se ignora si la notoria ausencia de algunos fue por falta de invitación o si teniéndola, les dio pena, miedo o andan trompudos (igual, se agradece).

 

Asumió el cargo Rutilio Escandón Cadenas (60 años de edad, cumplidos el 3 de mayo), licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Baja California, con Maestría y Doctorado por la UNAM. Senador de la república de 2000 a 2006; diputado federal de 2006 a 2009.

 

Como Senador fue presidente de la Comisión de Desarrollo Social; Secretario de las comisiones de Población y Desarrollo; Gobernación; Límites de las Entidades Federativas; y la de Justicia; integrante de las comisiones de la Medalla de Honor Belisario Domínguez, la de Derechos Humanos, y la de Concordia y Pacificación (COCOPA). Como Diputado formó parte de las comisiones de Régimen, Reglamentos y Prácticas Parlamentarias; la de Justicia, la de Derechos Humanos;  y de la temida (por justas razones), Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación.

 

En cosas de gobierno ha sido Agente del Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia del entonces D.F.; en Baja California fue Subdirector General del Instituto de Salud Mental; Jefe de No Migrantes del Instituto Nacional de Migración; Director de Trabajo y Previsión Social; Subdirector y Director del Registro Público de la Propiedad y Comercio. En Oaxaca fue Director Jurídico de BANRURAL.

 

En cuestiones migratorias tiene amplia experiencia, fue Delegado en el Instituto Nacional de Migración en Ixtapa-Zihuatanejo, Guerrero; Director de la Frontera Sur del Instituto Nacional de Migración; Subdelegado Regional y Director General del Jurídico de Migración en Chiapas.

 

Aparte, en Chiapas ha sido Director General de la Comisión Electoral y Magistrado Presidente del Poder Judicial.

 

No es hiperactivo ni practica el trapecismo político: se afilió al PRD en 1997 y luego se pasó a Morena. Sereno.

 

Su campaña para la elección de Gobernador fue estilo “Sonny” Liston (Charles Liston, campeón mundial de box -categoría  peso pesado-, de 1961 a 1964, considerado uno de los 10 mejores de la historia según la “International Boxing Research Organization”)… porque el “Sonny” parecía que no se movía en el cuadrilátero, tiraba pocos golpes y sus contrincantes acababan con las piernas de chicle, escupiendo muelas y después de la pelea no los reconocía ni su mamá: Escandón Cadenas ganó la elección con casi el doble de votos que el segundo lugar.

 

Así que en Chiapas y desde el sábado gobierna un Doctor en Derecho que conoce de primera mano cómo se cocina en los tres poderes -Legislativo, Judicial y Ejecutivo-; con amplia experiencia en administración pública, cuestiones migratorias, de procuración y aplicación de justicia; consistente en cuestiones políticas y (¡alabado sea el dios en que cada quien crea!), no es un chamaco y los que lo conocen y tratan, dicen que es de esos que antes de abrir la boca ya la pensaron muy bien… qué bueno. Ya era hora.

 

Chiapas vale en sí mismo, claro, pero para el país es el estado con mayor importancia regional, respecto de Centroamérica, e internacional, respecto de los EUA. Chiapas estuvo siempre abandonado a su suerte, hasta que al inicio de 1994, el EZLN hizo (obligó), a que el gobierno federal recapacitara en la existencia de la entidad. Se pretendió resolver todo mandando carretadas de dinero que no se tradujeron en beneficios directos a la población. Misterio con explicación de todos sabida.

 

Chiapas es un estado de inmensa riqueza potencial, no solo agropecuaria e hidroeléctrica (presas de Malpaso, La Angostura, Chicoasén y Peñitas, en las que se genera más del 40% de la energía hidroeléctrica nacional), sino también en otros rubros; solo el desarrollo de los megaproyectos que ya tiene elaborados el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para la entidad, haría que en un futuro no lejano -y muy posible-, cuando alguien viera a un tenochca simplex gastando a manos llenas, dijera: -Gasta como chiapaneco –no son sueños.

 

El nuevo Titular del Poder Ejecutivo en Chiapas recibe al estado en una situación de impensable desorden gubernamental y administrativo. Urge el actuar más sereno. Los golpes de efecto no sirven sino para muy poco. Pero desde el principio, con orden y rumbo. Nada más ejerciendo el presupuesto estatal en la entidad, con proveedores, contratistas y prestadores de servicios chiapanecos, se reactiva la muy maltrecha economía. El poder multiplicador del gasto público no es ilusorio.

 

Se la dejaron difícil al nuevo gobierno, pero el reto tiene solución si antes que nada, se respetan las leyes. Con eso, errores aparte (porque nadie acierta todas), se gobierna bien… sin activismo lucidor, sin creerse que diario hay que decir algo que cimbre al país o  iniciar alguna obra, que la obra pública se debe hacer, igual que muchas otras cosas, pero lo que hace respetable a un hombre de estado es su solidez moral, su respeto a la ley, su sentido de la justicia y su defensa del bien común.

 

No es la obra pública la regla para evaluar a los gobernantes, imaginen dónde estaría Hitler que, literalmente, reconstruyó a Alemania; o Mussolini, que hizo en Italia, lo que no está escrito (hasta los trenes llegaban a tiempo); piensen en Stalin, que industrializó a su país.

 

No, la obra pública no es la vara con que se mide a los políticos. Quiero que alguien me diga cuáles fueron las obras que llevaron a Churchill a los capítulos más respetados de la historia de occidente, por qué obras es venerado Charles De Gaulle, qué edificios inauguró Benito Juárez, a cuáles carreteras les dio el banderazo de inicio de construcción el Mohandas Mahatma (el Alma Grande) Gandhi.

 

De cualquier modo y después de todo, el nuevo Gobernador no la tiene tan difícil, basta con ser decente. Sin angustias, con alma y con calma, sin prisa y sin pausa.

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