Home Columnas La Feria / Con sabor a centavo

La Feria / Con sabor a centavo

La Feria / Con sabor a centavo
0
0

Sr. López

 

Tía Marita tuvo fama de lo que siempre fue: inmensamente tonta, no mala persona, no fodonga ni mala mamá; pero sí inmensamente tonta, pero tan tonta que una vez en una sobremesa, comentó que pensaba pedirle a Pepe (el más impresentable primo que tenerse pueda), que acompañara a Lulú (su hija mayor, que estaba mejor que la lavadora ‘De Luxe’ de la abuela Virgen), a un viaje de prácticas de la universidad a la sierra de Durango, para que “la cuidara”, y toda la mesa a una, le dijo: -¡No seas tonta! –y sí, la Lulú corría menos peligro sola que con él cuidándola. Cuando lo supo Pepe, dijo asombrado: -Pero, de veras que es tonta tía Marita -porque Pepe sabía quién era él… y cómo estaba Lulú (que además, era pizpireta).  

 

La mañana de ayer, el gobierno federal mexicano emitió un comunicado conjunto de las secretarías de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y de Relaciones Exteriores (SRE), que vitaminó el optimismo de este su texto servidor. Léalo y lo comentamos:

 

“Con respecto a las sanciones anunciadas por el gobierno de Estados Unidos a diversos funcionarios y ex funcionarios del gobierno de Venezuela por menoscabar la democracia y los derechos humanos en dicho país, así como por participación en actos de violencia, represión y corrupción, el gobierno de México, por conducto de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, informa que procederá en consecuencia, de conformidad con las leyes y convenios aplicables en la materia”.

 

Dirá usted “a este López ya se le descompuso el cerebro… ¿qué nos importa o en qué nos beneficia semejante cosa?”

 

Bueno, mire usted: si nuestro gobierno, apoyado en los tratados internacionales que ha firmado y por encima de eso, en su autoridad moral reconocida mundialmente, “procederá en consecuencia de conformidad con las leyes y convenios aplicables en la materia”, contra funcionarios y exfuncionarios del gobierno de Venezuela, por menoscabar la democracia (¡alégrese!), pues es de lógica elemental que procederán de la misma manera respecto de funcionarios y exfuncionarios mexicanos que tienen el feo hábito de evacuar sus desechos sólidos en nuestra democracia; ahorita mismo sin ir muy lejos, nada más con el criterio diferenciado para evaluar los gastos de campaña y la limpieza de las elecciones en el Estado de México y el de Coahuila, nomás con eso… porque deberían anularse ambos procesos, diga lo que diga el INE, diga lo que diga don Ochoa Reza. Ya luego les podemos proporcionar una lista -larga- de funcionarios y exfuncionarios mexicanos que se han bailado la huaracha y el jarabe tapatío en nuestra democracia, que no es nada más lo electoral, sino un amplio abanico de cosas con las que se han limpiado y limpian el extremo inferior de sus sistemas digestivos.

 

En buena lógica, si nuestro gobierno federal tiene la capacidad y puede evaluar  si en otro país se menoscabó la democracia, es mucho más fácil que lo hagan aquí mismo en nuestra casa. Que le dejen caer a Venezuela todo el rigor de nuestra afamada severidad democrática, está bien (quién sabe si esté bien, pero hay que agarrarles la palabra), a condición de que no anden nomas de farol de la calle y también lo hagan aquí en nuestro risueño país, en el que ya nadie creemos en los partidos, el INE, los institutos electorales locales, ni por supuesto y a la cabeza de todo lo que no creemos de nuestra democracia, en el tribunal electoral federal, esa prestigiada casa de subastas  de sentencias.

 

Pero ¡espere! (como dicen en los insoportables “infomerciales de la televisión), que falta lo mejor: nuestro gobierno va a “proceder en consecuencia” contra  Venezuela por los funcionarios y exfuncionarios de allá que hayan participado en actos de corrupción. ¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor!… se estaban tardando.

 

Nuestro gobierno va a ponerse a investigar en serio, con estas cosas no se juega. Lo explicó en comunicado aparte la SHCP: aplicará los convenios que tiene con distintos países (a través de la OCDE); con los EUA para aplicar la Ley (gringa) de Cumplimiento Tributario de las Cuentas de los Extranjeros (FATCA), que alcanza más de 60 países; y con el Grupo (internacional) de Acción Financiera contra el Blanqueo de Activos (GAFI). Encima (van sin compasión), buscarán información en la base de datos de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de Hacienda. O sea: en Venezuela, los corruptos  están a tecitos de tila y comiendo a puños pastillas de Diazepam, como si fueran cacahuates.

 

Por eso renace la fe con el anunció de nuestro gobierno. Aceptan nuestras autoridades que pueden averiguar sobre la corrupción de funcionarios y exfuncionarios de otro país… cuantimás no podrán con lo de casa. Si quieren (para que vean que la ciudadanía está de su lado), les podemos confeccionar una lista de nombres con la que pueden empezar sus labores de limpieza. Se van a tardar.

 

Si el Estado mexicano, por los compromisos, acuerdos y tratados que ha firmado con los EUA, otros muchos países y varios organismos internacionales, no puede hacerse el disimulado sobre el asunto de Venezuela, sería de esperar que fueran discretos, porque somos exactamente el acusador que necesita un cínico del calibre del tal Maduro, que es muy cínico y deslenguado, y se va a llenar la boca insultando a México. Si en general no es prudente ufanarse de virtudes, menos, siendo pecadores contumaces.

 

Dejando de lado el cinismo de proporciones titánicas de que la Rompecatres averigüe sobre las faltas a la castidad de la Tumbahombres,  si nuestro gobierno tiene capacidad para averiguar sobre actos de corrupción en otro país entonces resulta del todo exigible que lo hagan dentro de nuestro propio país. Sí, que recurran a la OCDE, la FACTA, el GAFI, su UIF y su CHM, para por ejemplo, lo de Javier N, que empezó en decenas de miles de millones de pesos y se les fue haciendo chiquito (el caso) y ahora -ante el Juez-, la PGR pudo presentar pruebas por unos cuantos millones que dejaron al peladaje (todos nosotros), la boca con sabor a centavo.

LEAVE YOUR COMMENT

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *