Home Columnas ¡¡Aguas con la UNAM!! / Epistolario

¡¡Aguas con la UNAM!! / Epistolario

¡¡Aguas con la UNAM!! / Epistolario
0
0

Por Armando Rojas Arévalo

 

IVANA: LA UNAM es, de acuerdo con el ranking, una de las 20 mejores universidades del mundo, por su calidad académica y sus altas investigaciones científicas. Como egresado, profesor de ella y mexicano me siento profundamente orgulloso; empero, al mismo tiempo estoy preocupado por la escalada de violencia en sus campus, los paros de protesta por la inseguridad y los problemas laborales que tienen paralizadas a otras instituciones de educación superior, UAM y Chapingo, y que podrían extenderse por contagio a nuestra Alma Máter.

Ojalá, lo digo con una gran preocupación, que el rechazo a la violencia y la solidaridad con instituciones educativas que se encuentren en huelga, en la UNAM no se produzcan movimientos desestabilizadores que afectarían gravemente la marcha de nuestra Casa. Por vía de mientras, desde el miércoles y hasta mañana viernes, hay un paro en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, de donde soy académico, en protesta por la violencia y específicamente la muerte de AIDEE MENDOZA, la chica que recibió un balazo 9 milímetros en pleno salón de clases en el CCH oriente la mañana del martes y nadie sabe por qué ni de los responsables.

Este es el segundo paro en la Facultad y en varias más, en lo que va de este semestre. El primero fue por la igualdad de género y éste, por el asesinato de AIDEE.

Recién llegó a la Rectoría de la UNAM, el doctor ENRIQUE GRAUE WIECHERS, prometió sacar a los anarcos y demás especímenes que desde hace años tienen tomadas las instalaciones del auditorio Justo Sierra de Filosofía y Letras. No ha ocurrido nada.

En tanto, la violencia aumenta, tanto en el campus principal de la UNAM como en los demás centros educativos que la institución tiene en la Ciudad de México. Los asaltos y agresiones contra estudiantes y maestros por parte de delincuentes, se han incrementado de manera notable, lo mismo que los homicidios y femicidios. Ha crecido el narcomenudeo. El porrismo tiene asoladas las escuelas.  

De acuerdo con una investigación que hizo el Contralínea.com.mx (13 de agosto de 2017), desde las Rectorías de JUAN RAMÓN DE LA FUENTE, NARRO ROBLES y GRAUE WIECHERS se han registrado 300 ataques sexuales en instalaciones de la UNAM. Además, han muerto 36 personas y cinco más desaparecieron. Fuera del campus, otros 12  universitarios han sido asesinados o desaparecidos.

Los nueve más recientes ocurrieron en poco más de 2 años. La UNAM reconoce oficialmente que 35 personas murieron en sus instalaciones entre el 23 de junio de 2006 y el 8 de mayo de 2017. A este dato debe agregársele una muerte ocurrida en una fecha posterior. Se trata de la que hubo entre la Biblioteca Central y la Facultad de Filosofía y Letras el 12 de junio. Entre las muertes más recientes destaca la de VICTOR MANUEL ORIHUELA ROJAS. El alumno de la Facultad de Odontología cayó desde varios pisos de la Facultad de Filosofía y Letras, sin que hasta el momento se haya determinado si fue asesinado o si se trató de un suicidio.

El 15 de marzo de 2018 fueron asesinadas la maestra GRACIELA CIFUENTES y su hija SOL, estudiante de Arquitectura. También MARÍA DEL ROSARIO PÉREZ GARCÍA, estudiante de la Facultad de Estudios Superiores de Cuautitlán; lo mismo MIRANDA MENDOZA FLORES, estudiante del CCH Oriente, quien salió de su casa y no volvió. Su cuerpo fue hallado sin vida.

La violencia se desbordó el 3 de septiembre de 2018, en la gresca de porros en terrenos de la Rectoría, por grupos del CCH Azcapotzalco y el Colegio de Ciencias y Humanidades de Naucalpan. En protesta, miles de universitarios desfilaron en el campus exigiendo orden.

El cuerpo de LESVY BERLIN OSORIO (que en el listado aparece como “exalumna”, aunque oficialmente no haya bajas en la UNAM),  fue encontrado al pie de una cabina telefónica el 3 de mayo de 2017. Al principio, las autoridades señalaron “suicidio”, hoy se tiene como sospechoso al novio de la víctima.

Un tercer hallazgo que destaca es el del jefe de servicios químicos JOSÉ JAIME BARRERA MORENO, ocurrido el 27 de junio de 2016. El asesinato con arma punzocortante también ha sido reivindicado por un grupo ecoextremista, aunque las autoridades de la Ciudad de México apuntan hacia tres trabajadores y dos alumnos.

Otro caso más: ADRIANA MORLETT, la estudiante de la Facultad de Arquitectura que desapareció el 6 de septiembre de 2010 tras acudir a la Biblioteca Central a retirar un libro. De la alumna no se supo nada por más de tres meses. El libro que ella sacó misteriosamente fue devuelto sin que las autoridades universitarias pudieran determinar quién lo entregó. El cuerpo de la chica apareció el 17 de diciembre en la carretera Picacho Ajusco. No se ha determinado quién la secuestró y la asesinó ni por qué motivos.

Hay casos de universitarios desaparecidos fuera de las instalaciones y que, hasta la fecha se desconoce su paradero. Uno de ellos que ha documentado la organización “Nos Hacen Falta”, es la de JESÚS ISRAEL MORENO PÉREZ, estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras, desapareció el 8 de julio de 2011 en Chacahua, Oaxaca.

COMO CONSECUENCIA de todo este desorden con violencia extrema, estudiantes de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) exigieron hoy, a través de un pliego petitorio, la renuncia del rector ENRIQUE GRAUE.

MIENTRAS, en Los Cabos, Baja California Sur, grupos de la sociedad civil demandan juicio político contra la alcaldesa ARMIDA CASTRO GUZMÁN, por no tomar acciones inmediatas para detener el crimen ecológico evitaando el secado y desaparición del Estero de San José,

ENRIQUE PEÑA NIETO subió hoy en Instagram la información de que ya está divorciado y que le desea a su ex esposa ANGÉLICA “que le vaya bien siempre y que tenga éxito en todo lo que emprenda”.

 

armandorojasarevalo@gmail.com

rojas.a.armando@hotmail.com

LEAVE YOUR COMMENT

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *