Rodulfo Reyes
El virtual nombramiento del ex priísta Jesús Alí de la Torre como subsecretario de Gobierno de la próxima administración, a cargo de Javier May Rodríguez, está causando ruido en las entrañas mismas de la llamada Cuarta Transformación.
Ayer, en la conferencia mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador, el ex candidato del PRI a la gubernatura de Tabasco volvió a ser el centro del escrutinio público, al igual que a finales del año pasado y por el mismo expediente.
Para ubicar el tamaño del daño que se le podría inflingir a la imagen de partido Morena por dicho tema, es menester precisar la situación en que se encuentra el personaje que lleva a cuestas haber representado a su partido en 2012 que el tricolor perdió ocho décadas de hegemonía.
Alí de la Torre se encuentra en calidad de indiciado en la Fiscalía General del Estado de México, debido a una denuncia penal que interpuso en su contra en septiembre del año pasado el empresario Abelardo de la Torre Suire.
Apenas el 10 de julio pasado el colaborador de José Ramiro López Obrador, próximo secretario de Gobierno, se presentó a declarar a la casa se justicia mexiquense.
Cabe aclarar que en un primer citatorio se negó a comparecer el priísta que llegó al lopezobradorismo apadrinado por Adán Augusto López Hernández.
Al segundo requerimiento tenía que acudir sí o sí, so pena de que el tercer citatorio ordenara el uso de la fuerza pública para llevarlo a Toluca en una “Julia”.
En términos estrictos Alí no se encuentra impedido para ser nombrado funcionario, pues aunque en la carpeta de investigación aparece como principal acusado, aún no se le ha girado orden de aprehensión.
Pero en las próximas semanas (o en un par de meses a lo mucho) su situación jurídica podría cambiar si lo encuentran responsable del señalamiento que le hace un viejo amigo suyo y de su familia.
El año pasado Abelardo de la Torre fue detenido de manera irregular en una plaza comercial del Valle de México por policías mexiquenses.
Cuenta que con engaños Gustavo Germán Vidal Vázquez, colaborador de Alí, lo citó allí para que lo detuvieran.
(Vidal Vázquez declarará en estos días, y a partir de esta última diligencia ya se podrá cerrar la indagatoria para determinarla).
Tras ser detenido, los agentes ministeriales de la Fiscalía mexiquense lo llevaron a esta institución, en donde lo hicieron firmar unos documentos que tenían como garantía un departamento en Polanco de su propiedad.
¡Ese departamento lo había tenido rentado el denunciante a la esposa de Alí!
La historia parecería de risa si no fuera porque el empresario estuvo preso en Reynosa, Tamaulipas, en donde de manera anónima lo habían acusado de matar a una persona seis años atrás.
De la Torre Suire logró desanclar la acusación que presuntamente le hizo su ex amigo Alí, y fue absuelto en segunda instancia del delito de homicidio.
Esta carpeta es la que está a punto de concluirse en Toluca, y que mantiene al virtual subsecretario de Gobierno como “actor” de la mañanera.
Ayer, a una pregunta “sembrada” sobre el caso, el presidente Andrés Manuel López Obrador se refirió a su paisano como “ese personaje”.
Los partidarios de Alí aseguran que el presidente “lo exoneró”; otros, más cautos, señalan que el mandamás no quiso entrarle al tema de manera directa.
En realidad es secundario si el Presidente “exoneró” o no al “personaje” y si se abstuvo de pronunciarse a favor o en contra.
Lo trascendental es que en dos ocasiones Alí de la Torre ha sido “sentado” en ese “tribunal moral” que es la mañanera.
La primera fue el 19 de diciembre de 2023, cuando fue denunciado por el empresario que lo acusa de secuestro y extorsión.
Como resultado de aquella vez, la Fiscalía mexiquense abrió una carpeta de investigación en contra de los policías de Edomex que detuvieron a Abelardo y lo trasladaron presuntamente de manera irregular a Tamaulipas.
Por la mención de ayer, la segunda ocasión que Alí se apodera del espacio mediático que concentra la atención de los mexicanos por la mañana, ¿cuál será la consecuencia?
Aquí sus partidarios apuestan a que será ratificado como segundo en la Secretaría de Gobierno porque el mandatario electo Javier May ya “detectó” que son “Adancistas” (sic) los que cuestionan a Alí y de paso al diputado Jorge Bracamonte, a quien algunos medios acusan de despojo junto a su hermana.
‘Palomita’ para la UJAT
La muy criticada UJAT no está haciendo mal la tarea en el ámbito académico. Vea usted: mientras la UNAM aceptó casi el 10 por ciento de las solicitudes de nuevo ingreso, la universidad local admitió a cerca del 60 por ciento. Aquí presentaron examen alrededor de 12 mil alumnos en todas las carreras, y en algunas se aceptó al total, siendo la excepción las de Ciencias de la Salud como Medicina, Enfermería, Nutrición, Odontologia, Psicología y Veterinaria, las cuales son muy demandadas. En Medicina se aceptaron 240 en Centro y 120 en Comalcalco, de un total de 3200. Ademas, la UJAT ofertará como segunda opción un total de más de 1700 espacios sin ocupar en diferentes carreras. Este dato muestra que la institución choca no anda perdida entre el montón: en la UJAT se aprobó a 360 alumnos en la carrera de médico cirujano, mientras en la UNAM solo se dio entrada a 186. Muy alto el contraste.