+ Con su fuerza de voluntad sigue vigente…
+ Consistente impulsor del arte y la cultura…
+ Hijo Pródigo de la Normal Rural Mactumatzá…
+ Escritor de pasajes históricos y nostalgias…
Ruperto Portela Alvarado.
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Jueves 09 de Junio de 2022.- Reconocer es honrar. Se estimula la vida y se ilumina el sendero a quien se hace el homenaje. Eso precisamente queremos ofrecer a un amigo como el maestro RUBÉN PINTO PÉREZ, profesor de banquillo, convicción y plena concepción de lo que debe ser la educación.
Creo haber conocido a nuestro personaje de hoy y siempre, hace unos 10 o 12 años y desde entonces, nos llenamos de amistad y concordia. De alguna manera hemos sido cómplices en algunos actos de la vida política y social, a partir de nuestras perspectivas y respectivas trincheras. Yo del periodismo y él como educador y luchador social que no ha dejado de ser.
El maestro RUBÉN PINTO PÉREZ se describe a sí mismo como un escribidor de cuentos, leyendas, entrevistas y crónicas fantásticas como las que nos relata en su libro de compilaciones: “Ocultos Enigmas de la Historia de México”. Es egresado de la Escuela Normal Rural Mactumatzá, con maestría en Psicología Educativa de la Normal Superior de México.
Puedo considerar que don RUBÉN PINTO es de los últimos profesores que fueron líderes en su comunidad de adscripción, donde él mismo era educador, consejero familiar, asesor agrarios, practicantes de la medicina y autoridad de la localidad, como todo maestro de antaño. Se desempeñó como tal en zonas rurales de los municipios de: Cacahoatán, Tuxtla Chico, Tapachula, Palenque, San Juan Chamula y Tenejapa allá por los años 1963, retirándose de la docencia y la administración pública en 1996.
Agrego en esta síntesis de la vida y obra de nuestro amigo RUBÉN PINTO PÉREZ, lo ya dicho en un poster promocional publicado recientemente: “Rubén Pinto Pérez les describe cuentos, leyendas, entrevistas y crónicas fantásticas como herencia cultural para las nuevas generaciones”. Nuestro personaje dice: “nació desnudo en el año de 1944 (hoy 78 años) a las 03:00 de la mañana en el rancho ´El Rosarito´, municipio de Frontera Comalapa, Chiapas, México”.
Habré de decir, como él me lo dijo, que es el séptimo hijo de don MANUEL PINTO LEÓN y doña CLARA LUZ PÉREZ. Recuerda que creció descalzo, que terminó su Primaria en la tercera generación de la escuela “Justo Sierra Méndez” y que se puso zapatos al ingresar a la “Heroica Escuela Normal Rural Mactumactzá” donde terminó su secundaria y maestro normalista rural de Educación Primaria en 1963.
Desde entonces (1963) ingresó como maestro normalista rural de Educación Primaria que ejerció durante 33 años hasta que se jubiló en 1996. Hace muchos años radica en Tuxtla Gutiérrez, donde promueve eventos culturales, pero también escribe sus “connotados comunicados”en páginas volantes que expresan su filiación izquierdista y razonados conceptos de crítica a gobernantes, el gobierno y la administración pública.
Recientemente presentó su último libro sobre “Experiencias Innominadas para Alumnos, Padres de Familia, Maestros, Orientadores y Psicólogos” que también está dirigido a estudiantes para su autoformación conductual. Por eso y otras virtudes que lo consideran como un hombre de convicciones y decisiones, se le vierte un reconocimiento por los “Amigos de Tuxtla y el Café La Torta Vaquera”, entre otros muchos que ha recibido en sus ya 78 años de vida que sigue promocionando la cultura y la participación social-política de los chiapanecos.
Para terminar, dejo este fragmento de su pensamiento que en estos tiempos de empoderamiento y desarrollo de las mujeres, tiene una significación en el entorno social:
¡Hay una mujer que tiene algo de Dios por la inmensidad de su amor y mucho Ángel; por la inalcanzable solicitud de sus cuidados. Una mujer que siendo joven, tiene la reflexión de una anciana; y en la vejez, trabajó con el vigor de una juventud. Una mujer que si es ignorante, descubre los secretos de la vida con más acierto que un sabio, y si es instruida, se acomoda a la simplicidad de los niños.
Una mujer que siendo pobre se satisface con la felicidad de los que ama; y siendo rica, daría con gusto su tesoro por no sufrir en su corazón, la herida de la ingratitud. Una mujer que siendo vigorosa se estremece con el vahído de un niño; y siendo débil, se reviste a veces con la bravura de un león. Una mujer que mientras vive, no la sabemos estimar; porque a su lado, todos los dolores se olvidan.
Pero, después de muerta, daríamos todo lo que somos y todo lo que tenemos por mirarla de nuevo un solo instante, por recibir de ella un solo abrazo, por escuchar un solo acento de sus labios. De esa mujer no me exijas el nombre si no quieres que empape con lágrimas las letras de este humilde tributo; porque ella invirtió su vida conmigo y me enseñó a conocer la verdad del camino.
Cuando crezcan vuestros hijos, leed esta página; y ellos, cubriendo de besos vuestra frente, os dirán que un humilde viajero, en pago del suntuoso hospedaje recibido, ha dejado aquí, para vos y para ellos, un boceto del retrato de su MADRE!
Es este el corazón y la voz de un hombre de valía, que se dedicó a la enseñanza de los niños y nunca ha sucumbido ante los avatares de la vida. Dejo este reconocimiento de todos sus amigos y el aplauso merecido para nuestro amigo aquí presente, profesor y maestro de generaciones, RUBÉN PINTO PÉREZ…
Con un saludo desde la Ciudad del Caos, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, la tierra del pozol, el nucú, la papausa y la chincuya.
Para contactarme: rupertoportela@gmail.com
Celular: 961 18 8 99 45.
MIEMBRO DE LA ASOCIACIÓN DE COLUMNISTAS CHIAPANECOS. A. C.
