* En las últimas semanas se ha reportado niñas y niños víctimas de trata en Cancún, feminicidios impunes y más de 338 mil menores en situación de trabajo infantil.
Redacción / Alfaro Noticias
La Red por los Derechos de las Infancias y Adolescencias en Chiapas (REDIAS) expresó su preocupación por el incremento de diversas formas de violencia que afectan a niñas, niños y adolescentes en la entidad, entre ellas la violencia armada en la frontera con Guatemala, el trabajo infantil y los recientes feminicidios de menores de edad.
En un pronunciamiento emitido en el marco del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, la red denunció la normalización del trabajo infantil en el estado y alertó que esta situación ha abierto el camino a redes de trata y explotación, sin que exista una política pública integral de prevención, atención y protección para las infancias.
“El Estado mexicano sigue sin garantizar a niñas, niños y adolescentes vivir libres de violencia”, señaló REDIAS. “Muchas infancias chiapanecas están siendo captadas y explotadas por redes de tratantes en el marco de una tolerancia institucional y una profunda precariedad social”.
Casos recientes documentados por la prensa nacional incluyen el rescate de 16 menores chiapanecos en Cancún, Quintana Roo, quienes eran obligados a vender pozol durante jornadas de hasta 12 horas, recibiendo apenas 100 pesos diarios. Las víctimas, originarias de comunidades indígenas, vivían hacinadas y en condiciones insalubres. El pasado 30 de mayo, 12 de ellos fueron regresados a Tuxtla Gutiérrez bajo custodia del DIF.
Otro caso ocurrió en Tuxtla Gutiérrez, donde la Fiscalía General del Estado rescató a tres menores víctimas de trata y pornografía infantil tras realizar cateos en dos domicilios. En uno de ellos, los menores fueron hallados en condiciones infrahumanas. En el otro se aseguraron computadoras, discos duros y cámaras con material de abuso infantil. La investigación sigue abierta.
REDIAS también mencionó el caso de los feminicidios de tres menores de edad en la región Altos, entre ellos el de Esmeralda Hernández, adolescente de 17 años de Huixtán, quien estaba embarazada. La red exigió justicia y pidió a las autoridades que integren una perspectiva de género en todos los niveles del sistema judicial.
Además, denunció que Chiapas ocupa el segundo lugar nacional en trabajo infantil, con más de 338 mil niñas, niños y adolescentes realizando alguna actividad económica. En comunidades indígenas y zonas rurales, el trabajo infantil ha sido naturalizado como parte de la vida familiar, lo que agrava el riesgo de explotación.
Casos de mendicidad forzada, accidentes en la vía pública y explotación sexual han sido documentados por el DIF municipal y organizaciones civiles. Entre 2023 y 2025, al menos 32 menores chiapanecos fueron rescatados en condiciones de explotación laboral en otros estados, principalmente en Quintana Roo.
A estas expresiones de violencia estructural, REDIAS sumó su preocupación por el contexto de violencia armada que se vive en la frontera sur de Chiapas. El pasado 8 de junio, en Frontera Comalapa, se registró un enfrentamiento entre grupos armados, con presencia de autoridades de México y Guatemala. REDIAS pidió al Estado mexicano implementar medidas urgentes para proteger la vida, integridad y derechos de niñas, niños y adolescentes en medio del conflicto.
“La violencia armada afecta la vida en todas sus dimensiones”, advirtió la red, citando los artículos 6 y 38 de la Convención sobre los Derechos de la Niñez, que obligan a los Estados a garantizar el desarrollo de la infancia y protegerla durante conflictos armados.