* El Movimiento de Mujeres en Defensa de la Madre Tierra, denunció la pérdida de tierras cultivables, el aumento del crimen organizado en el estado y los abusos relacionados con servicios básicos.
Daniela Alfaro
En la VI Asamblea del Movimiento de Mujeres en Defensa de la Madre Tierra y Nuestros Territorios, mujeres indígenas denunciaron el despojo de tierras y el aumento de violencia en sus comunidades debido a megaproyectos como el Tren Maya. Las participantes, provenientes de regiones como los Altos, Norte Selva y Costa, expresaron su preocupación por la creciente criminalidad, los desplazamientos forzados y la pérdida de soberanía alimentaria.
Las mujeres zoques, tsotsiles, tseltales y ch’oles destacaron que el avance del crimen organizado ha exacerbado la violencia en sus territorios. En la región de los Altos, informaron que las parcelas que antes cultivaban ahora están desoladas y llenas de temor, imposibilitando su trabajo en el campo y elevando los costos de los alimentos. Asimismo, la Región Norte Selva y Zoque señalaron el impacto destructivo del Tren Maya y otros megaproyectos, que han llevado a la fragmentación de sus territorios y la pérdida de conocimientos ancestrales.
Por su parte, las mujeres de la región Costa denunciaron no solo el despojo territorial y la inseguridad, sino también abusos relacionados con los servicios básicos, como altos costos de electricidad y constantes apagones. La violencia y la inseguridad han llevado a un aumento en el consumo de drogas entre los jóvenes, la trata de personas y la explotación sexual.
El grupo demandó un fortalecimiento de la organización comunitaria para enfrentar la violencia y el desplazamiento, así como la implementación de protocolos de seguridad y la recuperación de prácticas agrícolas tradicionales. Hicieron un llamado a unirse en la lucha por una vida digna y libre de violencia, instando a la sociedad a apoyar su resistencia y autonomía.
