Benito Coquet, quinto director del Seguro Social, decía que para que las personas puedan vivir bien necesitan de un entorno agradable que proporcione los servicios necesarios para una plena realización individual y colectiva. Coquet afirmaba que la salud no es ausencia de enfermedad, que la salud mental, social y familiar son fundamentales para la felicidad de las personas.
Por eso emprendió una estrategia de expansión del IMSS que no solo pasaba por construir hospitales y unidades de atención médica. Su gestión es conocida por el proyecto de bienestar y desarrollo cultural que incluyó una red de teatros, Centros de Seguridad Social para el desarrollo de técnicas y capacidades, y Centros Vacacionales para la recreación y el esparcimiento de las personas.
En vísperas de la Semana Santa, en este espacio aprovecharemos para hacer un recorrido por las fábricas y jardines prehispánicos que hoy son los Centros Vacacionales del IMSS. Buscamos que más gente los conozca y los utilice.
El Seguro Social hoy cuenta con cuatro centros, el más conocido es Oaxtepec, en Morelos, pero también se encuentra Atlixco-Metepec, en Puebla, y La Trinidad y Malintzi, en Tlaxcala. Los cuatro están abiertos para todo el público y ofrecen diversos tipos de hospedaje que van desde habitaciones de hotel, casas o cabañas de diferentes capacidades; los precios son accesibles y existen descuentos que van de 10 a 50 por ciento para trabajadores del IMSS o jubilados.
En los Centros Vacacionales se puede disfrutar de actividades como: andar en bicicleta, nadar, acampar, tienen áreas de fogatas, también hay gimnasios, canchas deportivas, pistas de atletismo, albercas, chapoteaderos, museos y teatros.
Oaxtepec destaca porque se dice que en 1438 Moctezuma estableció ahí sus baños personales, pues el espacio cuenta con nacimientos de aguas azufradas que se consideraba tenían propiedades medicinales. Desde entonces se valoraba como espacio idóneo para el descanso y la recuperación de la salud. Además, en ese mismo lugar se creó el que se considera el primer jardín botánico del continente, pues el tlatoani azteca ordenó traer plantas y flores de todas partes de México, cuya belleza hizo que Hernán Cortés lo mantuviera para su servicio.
Cuando se fundó Oaxtepec, Coquet decía que “Era una utopía destinada a los trabajadores de México”.
Malintzi es un espacio alejado de la ciudad y del estrés, ideal para retiros o reuniones tranquilas. Destacan sus paisajes, su cielo nocturno y su clima. Es también un espacio certificado en ecoturismo con buenas prácticas de gestión y calidad por la Secretaría de Turismo. Por sus características geográficas es ideal para quien busca hacer montañismo y senderismo.
El Centro Vacacional La Trinidad se encuentra en la antigua fábrica textil del mismo nombre en Tlaxcala. Fue construida con arquitectura ecléctica de origen inglés y actualmente se pueden visitar las máquinas que producían la energía para el funcionamiento de la fábrica, incluida una gran turbina de procedencia Suiza que movía agua del río Tequixquiatl.
Por último, a tan solo 20 minutos de la capital de Puebla se encuentra Atlixco-Metepec, lugar de descanso en lo que alguna vez fuera la Compañía Industrial Atlixco. Dentro de sus instalaciones alberga un museo Obrero Industrial, espacios para fogatas seguras y un teatro al aire libre.
Lo Coquet en el Seguro Social es el legado de su ex director, que nos enseñó que para que todo en el IMSS sea Bienestar debemos tener espacios de recreación que fortalezcan los núcleos familiares, se integre a la comunidad, cultive las relaciones humanas, promueva la libertad, el esparcimiento y la solidaridad social.