Sr. López
Contaba la abuela Elena de su tío Andrés, de allá de Autlán, que era más terco que tonto y más desconfiado que terco y tonto. Así, una vez se desató un incendio en sus tierras y salió al galope con sus hijos varones para atajar la lumbre pero al llegar se encontró con varios rancheros vecinos y sus peonadas, apagando el fuego con cobijas y cortándolo con troncos que arrastraban con sus cabalgaduras… y tío Andrés echando tiros al aire, furioso, los sacó: -¡En mi tierra nadie se mete…! (aquí va un adjetivo que rima con cajones) –perdió todo, siembras, ganado y casa. Pero a su tierra nadie se metía.
Ratificando nuestra naturaleza pueblerina, la prensa nacional ayer atendió la visita de Marco Rubio, secretario de Estado del vecino de arriba, como si fuera la Segunda Venida de Jesucristo.
La Presidenta explicó en su madrugadora que se iba aestablecer el Programa de Cooperación sobre Seguridad Fronteriza y Aplicación de la Ley, que según ella, “tiene que ver con colaboración sin subordinación, colaboración y cooperación en el marco de nuestras soberanías”. Bueno.
Lástima que ella misma dejó claro que la reunión con ese señor que ha dicho horrores de su gobierno y del de su antecesor, era para exactamente nada, pues agregó: “Se forma un grupo de alto nivel que en realidad ya se reunió una primera vez en Washington (…)”; o sea, a lo que dijeron que venía el tal Rubio, no vino, no hubo ningún acuerdo y ese ‘programa’ ya está funcionando, empezó allá.
Pero eso no quita que el Rubio reconoció después de la reunión con doña Sheinbaum, que las cosas van requetebien, por lo que dijo: “Me alegra mucho que hemos llegado a un nivel de cooperación histórico”.
Por eso la oficina de propaganda de Palacio nos presenta a doña Sheinbaum como a un Armillita, ese torero de Saltillo, que hizo la faena más premiada de la historia de la tauromaquia (toro ‘Clavelito’, 26 de julio de 1934, Barcelona; le dieron orejas, rabo, las cuatro patas y como el público no paraba de exigir más premios, le dieron las criadillas del torazo;rigurosamente cierto). Bueno, igual o mejor, doña Sheinbaum recibe a porta gayola, de rodillas frente a la puerta de toriles, a esa res brava, el Trump, y le hace faena. ¡Hurra, hurra!
Y qué podría decir nadie al saber que el Presidente de los EUA, declaró: “Nuestros dos países han desarrollado un nivel histórico de confianza y respeto mutuo (…) lo cual ha facilitado un nivel sin precedentes de cooperación bilateral durante el último año (…) Reconocimos los importantes éxitos logrados por México en la lucha contra el narcotráfico”.
Está en el boletín de la Oficina de Prensa de la Casa Blanca del 22 de marzo de 2002 (hace 23 años),porque lo dijo George Bush, en declaración conjunta con Fox, cuando la firma de “Los Compromisos de Monterrey” (que sirvieron para lo que se le junta al queso).
Tenemos al tío Sam hasta la coronilla pero sabe que elprecio de tratar con nosotros, porque le conviene, es echarnos flores en público y así, en privado, conseguir lo que le pega la gana de nuestros gallardos gobernantes. Así fue antes por la Guerra Fría, luegopor el T-MEC; ahora por eso, la migración y el fentanilo. Y declaraciones almibaradas aparte: no confían en nuestras autoridades, nada.
La Presidenta, calentando brazo para la reunión con el Rubio, el día anterior, 2 de septiembre, tuvo una reunión con todos los gobernadores del país y su gabinete de seguridad. Bonito. La señora informó: “Los acuerdos que se toman el día de hoy tienen que ver con aterrizar la estrategia en cada estado (…)”; y el Kalimán Harfuch (Batman es yanqui), declaró: “(…) necesitamos garantizar que las 32 policías estatales cuenten con un estado de fuerza óptimo que les permita operar en favor de la ciudadanía”. Traducción: se nos fue ya casi completo el primer año del sexenio pero ya vamos a aterrizar la estrategia en el país. ¡Chulada de máiz prieto!
Esas magnas reuniones no son ninguna novedad.Unos ejemplos: 3 de septiembre de 1996 con Zedillo, para coordinar policías y ejército en todo el país (no Calderón); 8 de mayo de 2001 con Fox, acuerdo nacional que estableció que la seguridad pública es una función a cargo de la federación, las entidades federativas y los municipios (igualito al de doña Sheinbaum); 21 de agosto de 2008 con Calderón, el acuerdo nacional por la seguridad, la justicia y la legalidad, como “mecanismo” entre los tres poderes y los tres órdenes de gobierno que conforman el Estado Mexicano, para que cada uno realizara acciones específicas en favor de la seguridad; 2 marzo 2016con Peña Nieto: mandatarios estatales de todo el país apoyaron el llamado a la unidad del Presidente en estos momentos difíciles que vive la nación… “hay que intentarlo todo, ya que lo que está de por medio es el país y la seguridad de los mexicanos”.
El tal Señor de los Abrazos fue el que rompió todos los récords: diario hacía su reunión de Gabinete de Seguridad a las 6 de la mañana, estrategia muy inteligente para madrugarle a los delincuentes.
Ninguna de esas reuniones sirvió de nada, como sabemos. Por cierto, el crimen organizado en México, el entonces presidente Miguel de la Madrid, en 1986 lo definió como asunto de seguridad nacional por el incremento del poder del narcotráfico; se hicieron adecuaciones legales y reformas a la PGR, Fuerzas Armadas, de Gobernación… y el resultado fue… nada.
Además si de veras este gobierno quiere que le creamos que no lo calienta ni el sol por la inseguridad, que nos explique por qué el presupuesto para seguridad pública de este año respecto del 2024, tuvo un recorte del 42.9%; solo a la Guardia Nacional le bajaron el 55.2%.
Así es, que no se entere don Rubio: el presupuesto 2025 destinado a las funciones de seguridad, asuntos de orden público y justicia, es el más bajo desde 2010 (dato de México Evalúa). Todo es discurso, purasbabas.
¡Ah!, pero nuestra soberanía, Mr. Rubio, nos la respetan… nuestra soberanía para no hacer lo debido,para hacer soberanas barbaridades.