* El Centro denunció que las políticas migratorias de criminalización han permitido que los traficantes de personas operen con impunidad, lo que ha causado un aumento en las desapariciones
Redacción / Alfaro Noticias
Durante su conferencia matutina, la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, destacó el trabajo realizado en la mejora de la seguridad en Chiapas. Sheinbaum resaltó que la implementación de políticas de pacificación ha generado una percepción positiva entre los habitantes del estado, especialmente durante eventos públicos en los que la ciudadanía ha aplaudido los esfuerzos para mejorar la seguridad. “Si no hubiera una percepción de mayor seguridad, difícilmente arrancaría los aplausos que se dieron”, comentó la presidenta.
A pesar de este reconocimiento, las organizaciones de derechos humanos, como el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba), han reportado un aumento alarmante de la violencia en Chiapas en los últimos años. Según el informe de Frayba presentado el día de ayer, las desapariciones han aumentado un 299 por ciento en los últimos cinco años, alcanzando un total de mil 277 casos en 2024, en comparación con 320 casos en 2019. Las mujeres adolescentes son las principales víctimas de estos crímenes, con cifras que superan el promedio nacional.
En su último informe, Frayba también señaló que el estado se ha convertido en un lugar clave para el tráfico de personas, ya que muchas organizaciones criminales se aprovechan de su ubicación estratégica como ruta de tránsito para migrantes. La organización denunció que las políticas migratorias de criminalización del gobierno mexicano, especialmente bajo presión de Estados Unidos, han dejado a los traficantes operar con impunidad, contribuyendo al incremento de desapariciones, sobre todo de mujeres y niñas.
El informe también menciona el impacto negativo de la explotación minera en el estado, particularmente en comunidades como Nuevo Morelia, en el municipio de Chicomuselo. La lucha por los recursos naturales ha generado enfrentamientos violentos y desplazamientos forzados, que involucran a grupos criminales que buscan imponer sus intereses en las comunidades locales, aumentando la inseguridad en estas áreas.
A pesar de los esfuerzos del gobernador en la materia de seguridad, las cifras de violencia y desapariciones siguen siendo alarmantes. Las principales ciudades afectadas incluyen Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal de Las Casas y Tapachula, con un alto número de casos de desaparición y violencia armada.
Durante su visita el pasado fin de semana, Sheinbaum instó a seguir trabajando en la pacificación de Chiapas, pero las organizaciones de derechos humanos subrayan que la violencia sigue siendo un problema central que requiere una acción más decidida con la colaboración de la federación.
