* Aseguró que la medida mantendrá la independencia técnica de estas instituciones, respetando compromisos internacionales y optimizando recursos.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció este miércoles que su gobierno llevará a cabo una reforma que incluirá la desaparición de varios organismos autónomos, entre ellos el Instituto Nacional de Transparencia (INAI), la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT). En lugar de estos, se creará un nuevo organismo descentralizado que asumirá sus funciones esenciales, pero con una estructura adaptada a las necesidades del contexto nacional.
La propuesta, que fue confirmada por la mandataria en su conferencia matutina, establece que el nuevo órgano descentralizado mantendrá la independencia técnica de los organismos que sustituirá, en particular en las áreas de combate a monopolios y promoción de la competencia económica. La nueva entidad estará adscrita a la Secretaría de Economía, pero con personalidad jurídica y patrimonio propios. Sheinbaum destacó que esta reforma también responde a compromisos internacionales, como los establecidos en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), en los cuales se busca garantizar la competencia sin comprometer la soberanía del país.
Sobre la designación del titular de este nuevo organismo, Sheinbaum explicó que podría ser designado por el Ejecutivo o ratificado por el Senado, lo que será definido en la legislación secundaria. Además, subrayó que la ley secundaria contemplará la inclusión de ciudadanos para garantizar la independencia técnica del nuevo organismo, que, según la mandataria, conservará el “espíritu original” de los organismos que se extinguirán.
La reforma no solo implica la desaparición de la Cofece, el IFT y el INAI, sino también de otros organismos como la Comisión Reguladora de Energía (CRE), la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). Las funciones de estos órganos serán asumidas por distintas secretarías, en un esfuerzo por simplificar la administración pública y reducir los gastos derivados de estructuras burocráticas.
La reestructuración propuesta también se dirige a la optimización de recursos, asegurando que las funciones de estos organismos continúen, pero sin las grandes estructuras y gastos que, según el gobierno, son innecesarios en el contexto actual. Sheinbaum enfatizó que, con esta reforma, se busca garantizar la eficiencia del Estado y responder a las necesidades de la sociedad mexicana.
La reforma está siendo discutida actualmente en el Congreso, donde ha generado una fuerte oposición por parte de algunos sectores políticos y especialistas, quienes advierten que esta medida podría debilitar los contrapesos institucionales y la autonomía de los órganos reguladores. A pesar de estas críticas, el gobierno asegura que la reforma es una respuesta necesaria para mejorar la eficiencia administrativa y asegurar que las funciones de estos organismos se lleven a cabo de manera más adecuada para el contexto nacional.