+ La obra de “Satanás” y el “Diablo” Albores…
+ El Chamaco no tiene pegue con la gente…
+ Hace falta más colmillo para levantar al muerto…
+ El Willy Ochoa queda fuera del proyecto PRI…
Ruperto Portela Alvarado
UN GRAN SALTO, PARA ATRÁS…
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Está claro que “el PRI es un muerto que todavía respira”, pero el oxígeno que le pudieran haber suministrado con el regreso de la “vieja guardia” se vino abajo con la nominación de RUBÉN ANTONIO ZUARTH ESQUINCA en la dirigencia del tricolor de Chiapas. Por supuesto que no hay comparación entre este “imberbe” encumbrado con el pasado tenebroso de ROBERTO ALBORES GLEASON y JULIÁN NAZAR MORALES, quienes acabaron con lo poco que quedaba de la otrora aplanadora electoral.
No se puede negar que este es un logro político que viene desde el averno con la bendición de “Satanás” y “El Diablo” Albores Guillén y Albores Gleason, respectivamente. De vuelta los personajes del infierno que una vez renegaron de su partido y se fueron a otras opciones del poder con aquella deslucida “Fuerza Democrática” que apoyó a JUAN JOSÉ SABINES GUERRERO o el entonces “Senador Azufrado” que se entregó en cuerpo y alma al poder de MANUEL VELASCO COELLO, del que inclusive fue su suplente en la senaduría. La historia está escrita con traición y sumisiones.
Poco le duró el gusto a HÉCTOR AURELIO ROBELO BÁEZ, cuya bola de strike y ponche, ya estaba cantada desde el momento de su ascensión a la dirigencia estatal del PRI, en relevo del nefasto “Talibán”, JULIÁN NAZAR MORALES. Aunque de hecho y en los hechos, ROBELO “cayo para arriba” al ser nombrado Secretario General Adjunto en el Comité Ejecutivo Nacional. ¡Nadita!; pero a lo mejor eso fue solo una salida decorosa o premio de consolación.
Tampoco es un secreto que RUBÉN ZUARTH ha vivido políticamente a la sombra de los tenebrosos personajes del infierno que representa el ex Gobernador ROBERTO ARMANDO ALBORES GUILLÉN y principalmente de su “carnal de doble rayas”, el “Diablito” ROBERTO ARMANDO ALBORES GLEASON, de quien fue su suplente en la senaduría que asumió cuando éste se proclamó candidato a la gubernatura de Chiapas en las elecciones de 2018.
Queda en duda la capacidad del nuevo dirigente del PRI-Chiapas, ZUARTH ESQUINCA para aglutinar, cohesionar y consolidar a la militancia tricolor por falta de cercanía con ellos; con los que no pega y a los que nunca ha tratado y menos convivido. No tiene experiencia en las lides políticas activistas y electorales que esta vez le tocará coordinar en conjunción con el delegado nacional en Chiapas, ERUVIEL LORENZO ALONSO QUE, quien ostenta este nombramiento desde el 26 de octubre de 2018 y ratificado el pasado 18 de septiembre de 2020.
Se insiste que el recién nombrado este pasado miércoles 04 de noviembre como dirigente estatal del PRI, es una hechura política administrativa, en toda la extensión, del azufrado “Diablito Albores”, o más bien una especie de “chambelán mefistofélico” que no tiene iniciativa propia ni patrimonio político construido por él mismo. Fue ALBORES GLEASON en calidad de Senador quien impulsó a RUBÉN ZUARTH para ser delegado de PROSPERA y un rato de la SEDATU en Chiapas.
También hay que decir que este nuevo dirigente priísta gozó de las mieles de presupuesto como Senador de la República al sustituir a ALBORES GLEASON en la curul cuando “El Diablo” fue nombrado candidato del PRI al Gobierno de Chiapas, que perdió por su soberbia e insolencia…entre otras cosas.
Habría que ver cuáles fueron las cartas de presentación de RUBÉN ANTONIO ZUARH ESQUINCA para que el dirigente nacional ALEJANDRO MORENO CÁRDENAS “Amlito” le encargara esta seria responsabilidad política en tiempos electorales. Me parece que por la situación misma del partido tricolor, este no era el momento de un “imberbe” sin experiencia, para dirigir las próximas actividades electorales de nombrar candidatos e impulsar triunfos que se ven muy lejanos.
Abogando a favor de ZUARTH ESQUINCA, su juventud es una oportunidad para los de su generación y una ventaja para aglutinar a los militantes de estos tiempos. Por ahí puede empezar el “ahijado” de “Satanás” y “El Diablito”, aunque fue una pifia muy grande, dejar fuera a la vieja guardia con experiencia, como SAMI DAVID DAVID, ARELY MADRID TOVILLA e inclusive a JOSÉ ANTONIO AGUILAR BODEGAS, aunque esté fuera del partido y circulación.
No deja de llamar la atención los dichos de que “El Cacique” comiteco, JORGE DE LA VEGA DOMÍNGUEZ está apostado en el CEN del PRI a la diestra y conciencia del dirigente nacional, ALEJANDRO MORENO CÁRDENAS, al igual que se menciona a SAMI DAVID como uno de los asesores del campechano presidente nacional del tricolor. Bueno, es también lo que se sabe de ARELY MADRID TOVILLA, quien opera en una cartera en las oficinas centrales del tricolor. Gente con demasiada experiencia.
Pero se tiene que insistir en que, al nuevo dirigente del PRI-Chiapas, RUBÉN ANTONIO ZUARTH ESQUINCA le hace falta colmillos para atender estos asuntos de vital importancia política electoral, en tiempos de “vacas flacas” y un partido que se estremece en los estertores de una muerte anunciada, a pesar de qué, todavía respira. Diría de manera coloquial, que “el chamaco no tiene cercanía con la gente” por ser un político de escritorio y miembro distinguido del círculo de poder que no se roza con el proletariado.
En fin, queda la duda si el nombramiento hecho por el campechano dirigente nacional del PRI, ALEJANDRO MORENO CÁRDENAS en la persona del villaflorense ZUARTH ESQUINCA fue una especie de suerte y al azar o por influencias que valieron más que las viejas guardias y experiencias. El tiempo dirá la última palabra; pero por lo pronto, no se ven luces al final del túnel en el que está metido el PRI como tercera fuerza política en Chiapas y cuarto a nivel nacional.
Aunque, contra todo, hay que darle el beneficio de la duda a un joven que debe hacer valer su calidad y capacidad política para sacar “al buey de la barranca” y no dejar en mal a su generación que tanto ha exigido una oportunidad en la vida partidaria del Revolucionario Institucional. Porque es muy cierto, “su mentor” y jefe de esta fracción de la banda comiteca, ROBERTO ALBORES GLEASON, en ocho años de dirigencia, dejó más negativos que resultados positivos en una dirigencia opaca y quizá hasta corrupta. Esperemos resultados…
Se acabó el mecate… Y ES TODO…
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