Sr. López
Tío Mauro (de los de Autlán), enviudó de tía Rita a los 47 años de casado. No era mal hombre pero muy borracho. Daba el ‘gasto’, pero era muy borracho. No fue mal padre, pero sí muy borracho. Algún otro tío le preguntó cómo había hecho para durar casado tantos años y contestó que en todo le daba gusto a Rita su señora, que lo que le pidiera le concedía, lo que fuera; y como el otro le preguntó si nunca le había pedido que dejara la borrachera, tío Mauro, muy airado, dijo: -¡Ah, no!… todo tiene límites -¡caray!
Conocidos son los desencuentros que tiene doña Sheinbaum con su partido, Morena, aunque ya para asumir el cargo, oficialmente “pidió licencia” a su militancia el 22 de septiembre del año pasado. Pero, igual, es de Morena y es su partido, en el que la presidencia nacional está en manos de una incondicional del Señor de los Abrazos y el cargo político más operativo lo tiene Andy, el hijito del visitante frecuente a Badiraguato.
También son sabidos los disgustos tiene con los dirigentes de Morena en las cámaras de Diputados y Senadores, donde el liderazgo lo tienen dos de sus competidores por la presidencia de la república (bromita estudiantil que le hizo el que NO vive en Palenque).
Se dice cada vez más fuerte, que la señora no tiene el mando, como los mexicanos concebimos el mando presidencial: autoridad absoluta, primera y última voz en todo asunto de gobierno y de su partido. No es el caso.
La señora del bastón de palo no ha podido (o sabido), meter en cintura a un Congreso en el que tiene mayoría para todo.
Nuestro Congreso en tiempos del PRI imperial, fuefamoso en la Vía Láctea (galaxia en la que está nuestro sistema solar), por su sumisión todo terreno, a los dictados presidenciales, sin miedo al ridículo y disfrutando la abyección, fama que recobró cuando llegó a la presidencia ese priista a la antigüita que se alojó en Palacio de 2018 a 2024.
Y doña Sheinbaum con ese Congreso en que tiene mayoría para que le aprueben que el mundo es plano, no ha conseguido que le aprueben las leyes secundarias de ocho de las 13 reformas constitucionales del Plan C (el de su guía, faro y admirado mentor); y sin eso, no se pueden aplicar, son nada. Tampoco ha conseguido que le aprueben las de tres de sus cuatro reformas constitucionales. Adán Augusto López, Ricardo Monreal y la dirigentemorenista, Luisa María Alcalde, van a su aire.
Muy sonado fue que no le aprobaron su iniciativa de reforma constitucional prohibiendo el nepotismo y la reelección en las candidaturas a puestos de elección a partir del 2027 (recorrieron el plazo a 2030). Y también fue muy sonado que ante eso, la señora de Palacio, mandó una carta a Morena pidiendo incorporaralgunas de sus sugerencias “como principios ético-políticos de nuestro Movimiento” (dicho por ella en su cartita), entre ellas lo del nepotismo (ya no dijo nada de la reelección).
Y le aprobaron lo del nepotismo a partir del 2027, en la VI Sesión Ordinaria del Consejo Nacional de Morena,del domingo pasado, pero dejando fuera su “sugerencia” contra las precampañas anticipadas, que según el artículo segundo transitorio del proyecto que iba a aprobarse en tan rumbosa sesión, decía:
“Suspenderán cualquier acto que pueda ser considerado como proselitista, de promoción personal o personalizada para el caso de los servidores públicos. O cualquier acto anticipado a las precampañas y campañas electorales en el marco del proceso electoral 2025-2026 y los subsecuentes”.
En el documento aprobado desapareció ese transitorio, tal vez porque se necesita tener muy dura la cara para tratar de imponer a su partido la prohibición de campañas anticipadas, cuando la autora de la sugerencia hizo campaña anticipada desde finesdel año 2022 (¿sí se acuerda usted de los anuncios espectaculares en todo el país con la silueta de la cabeza de perfil de la señora Sheinbaum y la leyenda “Es Claudia”?), a contrapelo de las leyes electorales y artículo 134 constitucional, que al final de su penúltimo párrafo, ordena: “En ningún caso esta propaganda (de gobierno) incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público”. Lea despacito: nombres, imágenes… y la doñita era servidora pública, Jefa de Gobierno de la CdMx.
Lo legal era realizar precampañas del 20 de noviembre de 2023 al 18 de enero de 2024; y la campaña ya formalita, del 1 de marzo al 29 de mayo del 2024. Qué tanta anticipación fue iniciar ¡un año antes!, sin olvidar que quien entonces era el huésped de Palacio realmente dio inicio a la anticipadísima campaña presidencial desde julio del 2021, cuando nombró a sus corcholatas y se exhibía con Claudia alzándole la mano y señalándola con un dedo (y ya sabe: “lo que diga mi dedito”). En fin.
Para calcular la temperatura al asunto, decidieron retrasar hasta 2030 lo del no al nepotismo, 97 diputados de Morena & Cía. De ese calibre es el desencuentro entre morenistas y presidencia de la república y así quedó en la Constitución, entrará en vigor hasta 2030 la prohibición de la parentela, digan lo que digan los documentos internos de Morena; y le anticipo, veremos candidatos mediante amparo o cualquier otro desfiguro, nada nunca les ha dado asco.
No falta quien piensa que doña bastonera con ese logro de modificar los documentos de Morena contra el nepotismo, por fin dio un manotazo en la mesa, impidiendo al hijo de su macuspano padre, ser candidato en 2030. No.
La reforma constitucional (artículos 55, 59, 82, 115, 116 y 122), ordena que “las personas interesadas en participar en algún cargo de elección popular no tengan vínculo consanguíneo o conyugal con una persona que ocupa el cargo en al menos los últimos tres años”; y papi fue Presidente hasta 2024, seis años antes del 2030. El nene cuyo currículum es ser hijo de su papá puede ser candidato a lo que le dé la gana si le da la gana.
Todo tiene límites, ¡ya parece que la señora iba a interponerse al poderoso hijo!… debe ser triste no tener el mando, puro bastón.
