1. Home
  2. Columnas
  3. Poder y soberbia / Al Sur con Montalvo

Poder y soberbia / Al Sur con Montalvo

Poder y soberbia / Al Sur con Montalvo
0

Guillermo Ochoa-Montalvo

—Tercera parte—

Querida Ana Karen, 

Amanda descendió de un lujoso automóvil aerodinámico en la cafetería después de comer con una joven ejecutiva de una importante empresa financiera transnacional.

—¿Por qué esa actitud tan altanera y soberbia, Amanda?, -le pregunté al verla entrar barriendo a todos con la mirada, su abrigo al hombro y caminando como flotando como si el piso no la mereciera.

—¡El Poder, el poder! La lucha por el PODER es intrínseca al ser humano; con audacia e inteligencia, valor y astucia competimos con millones de espermatozoides y ganamos esa carrera. A partir de entonces, buscamos dominar en la familia, el colegio, en el trabajo, entre las amistades y en cualquier círculo donde nos vamos. ¡Claro!, no todos, los sumisos, miedosos y con mente de pobreza, serán felices y su pequeño poder no rebasará los límites de sus comunidades, más la de aquellos que se atrevan a revelar rompiendo sus propias cadenas…

—Eso lo sabemos, Amanda, pero ¿a que viene al caso?

—En la sociedad, son los Poderes fácticos quienes mueven el dinero y ese es el Poder Supremo. Conversando con esa chica de 27 años, la que me trajo a la cafetería lo comprendí perfectamente.

—Eso ya lo hemos sabido desde siempre, Amanda, ¿que hay de novedoso en ello?

—Mira, no se trata de quienes son, sino de cómo lo logran. El poder fáctico se ejerce en la sociedad al margen de las instituciones legales. Olvídate del tipo de sistema de gobierno, estado o ideologías; todos , absolutamente todos, estamos sujetos al poder fáctico presiona, influye y dicta sus propias reglas movilizando la mercancía más cara y ambicionada por la gente: el DINERO

—Eso es claro, Amanda; esas personas, grupos y organizaciones como es el Foro Económico Mundial dictan las políticas públicas de las naciones e imponen el orden económico internacional a su conveniencia; utilizan a los bancos como herramienta de atracción y presión a los gobiernos para lograr sus propósitos mediante préstamos impagables que operan desde el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y muchos más desde consenso de las Naciones Unidas hasta los comités comunitarios de planeación que adoptan diferentes nombres en cada país, aquí les llamamos COPLADEM y son reconocidos por la propia Constitución.

—¡Exacto! Esa es la fórmula en que opera el poder fáctico. Ellos deciden haciendo creer que son las instituciones legales quienes dirigen a sus naciones. Son camaleones disfrazados de democracias, dictaduras, monarquías, parlamentos constitucionales o lo que sea; pero en el fondo, ellos son la uno que  mueve las piezas del ajedrez. El poder fáctico actúa imponiendo leyes e incluso, por encima de las buenas intenciones de los gobernantes quienes al final, deben obedecer o los matan, encarcelan o destierran, porque el pequeño poder de los gobernantes, se trate de un Predidente, gobernador o un simple alcalde, es un poder prestado en tanto sirva al Poder Supremo.

—Amanda, todo el mundo sabe que el poder fáctico que ejercen la empresas transnacionales, influyen de forma mediática en la vida económica, social y política de los países a través de de inversiones, lobby, o incluso presionando a los gobiernos para que adopten ciertas políticas. Esos grupos como es la delincuencia organizada, las iglesias, empresas, fuentes financieras, emplean a los medios de información, a las religiones, universidades, partidos políticos y a quien sea, para imponer su voluntad, sea o no de interés común.

—Así es como ellos operan generando tensiones en los gobiernos democráticos debilitando a las instituciones que les estorben, generando pobreza, alentando la ignorancia y hasta inventando “causas” para promover cambios en la sociedad que les favorezca. El poder fáctico puede dificultar la implementación de políticas públicas que beneficien a la sociedad en su conjunto. 

—Si Amanda, el poder fáctico es capaz de actuar como salvador del mundo durmiendo al pueblo con el uso de las tecnologías modernas; la manipulación de contenidos a través del arte, el cine y la televisión , principalmente. Son amigos de la cooperación global donde reúnen a líderes mundiales, sectores públicos y privados con el discurso de erradicar la miseria, la corrupción y la violencia, que ellos mismo generan.

—Tenemos el ejemplo del For Económico Mundial que empezó por reunir a los grandes magnates del mundo para lg incluir a los gobernantes para dictarles la agenda y políticas publica a seguir dejando de lado las preocupaciones de otros sectores de la sociedad. El FME representa principalmente los intereses de las grandes corporaciones y élites globales, y su instrumento son los bancos a través del dinero que todos necesitan. No existe transparencia en la toma de decisiones del FEM y nadie puede acceder a sus secretos. Apúntalo: la SECRECÍA es el primer elemento del poder fáctico.

—A ese grupo elitista del Foro Económico Mundial pertenece gente como Bill Gates quien se hace pasar por filántropo de la educación, la salud, las industrias y las innovaciones a través de la Fundación Bill & Melinda Gates.

—¡Justamente! El segundo elemento es el control de la industria FARMACÉUTICA. Los fármacos no solamente generan dinero a caudales, son el medio para controlar a cualquier sociedad dándoles acceso o no a los servicios de salud; e incluso, provocando pandemias. La salud un pueblo impacta en sus rendimiento personal, economía nacional en sus niveles de bienestar o de rebeldía social por ausencia de medicamentos y atención digna. Así es como esa elite domina por un lado y aparece como benefactor, por el otro.

—Pues entonces, Amanda, diremos que el tercer elementos es la manipulación de la TECNOLOGÍA que hoy es capaz de ejercer un riguroso control social a través de lo que conocemos y utilizamos cada día: programas de Microsoft, Apple o cualquier otra de China; uso de los celulares; presencia en las plataformas y redes sociales. Y encima, la inteligencia artificial; esa poderosa herramienta con la que jugamos, mientras ellos, juegan con nosotros.

—El dominio de la Tecnología se extiende al control de las industrias. Dime, ¿que nación puede aspirar a su desarrollo sin tecnología? Ninguno. Sin tecnología las naciones son pobres, productoras de materias primas, pero sin capacidad e transformarlas en mercancías con valor agregado. Dime que industria se mueve sin tecnologías. 

—Consideremos otros elementos, Amanda, como el MIEDO, la CORRUPCIÓN, la IGNORANCIA y la sustentabilidad de la POBREZA, con ellos, se facilita el control, sometimiento y dominación de los pueblos como lo han dicho los estudiosos de la ciencia política. Ahora, ya podrás dar tu conferencia e incluso, al desarrollar estos temas, estarás en posibilidad de publicar tu libro.

—Te olvidas del principal elemento para dominar a políticos, funcionarios mayores y menores.

—¿A qué te refieres, Amanda?

—A la SOBERBIA, esa inyección del virus más letal que se les inyecta a quienes creen ejercer un poder , cualesquiera que sea este. La soberbia debilita las mentes más brillantes, a las mejor intencionadas, y desde ahí, con soberbia y dinero, todo es posible.

Amanda salió flotando para encontrarse con su reciente amiga, la financiera. Sólo algo me quedo en claro, Ana Karen, resistir al poder y la soberbia es una cuestión de amor. 

​​ de

LEAVE YOUR COMMENT

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *