Manuel Ruiseñor Liévano
Con un mensaje político claro y categórico, vasto en referencias históricas y culturales, desplegado sobre dos temas principales: seguridad y paz, así como proyectos estratégicos, ayer domingo 8 de diciembre inició formalmente la llamada nueva era de Chiapas, con la protesta de ley como nuevo gobernador constitucional, por parte de Eduardo Ramírez Aguilar, ante el pleno del Congreso del Estado.
Un político, hay que subrayarlo, que no proviene de las dinastías familiares del poder ni de la añeja clase política chiapaneca, la cual, tradicionalmente, se ha traspasado la correa del mando del Ejecutivo, salvo honrosas excepciones. Eduardo Ramírez Aguilar es producto de la forja cotidiana y consistente, de esa manera diferente de hacer política caminando a ras de tierra sin zancos ni coturnos y que, acaso por esa causa, es prolija y empática en encuentros con la gente más olvidada, pero significativamente solidaria con quien identifica como de uno los suyos; es decir, pueblo con pueblo.
Eso quizás también explique el hecho de que 8 de cada 10 chiapanecos que acudieron a las urnas, hayan cruzado la boleta en su favor. Y, en otra medida, aclare el por qué la coalición partidista que abanderó su proyecto es la más grande de la cual se tenga registro en el acontecer electoral chiapaneco.
Volviendo al escenario de la emblemática jornada de ayer domingo, y acorde con una estimación de autoridades de protección civil, cerca de 8 mil chiapanecas y chiapanecos aguardaron al popular Jaguar Negro a las afueras de Poliforum Mesoamericano, habilitado como recinto oficial del poder Legislativo, en el marco de un acto nutrido por la clase política representada por una docena de gobernadores morenistas, donde por aparte resaltó la presencia del gobernador panista de Querétaro, así como las figuras de los líderes en el Congreso de la Unión, del partido en el poder y sus aliados y funcionarios de los tres órdenes de gobierno.
UNIDAD Y RECONCILIACIÓN, SEGURIDAD Y PAZ
Ramírez Aguilar comenzó su mensaje abordando el tema más esperado por la mayoría de los chiapanecos, obvio, en razón del clima de violencia prevaleciente: la seguridad y tranquilidad rota en los últimos tiempos por la acción de la delincuencia organizada, la cual ha fincado presencia en zonas importantes de la geografía del estado, caracterizadas por ser motor de la producción agropecuaria, el turismo y otras actividades económicamente significativas, pero además y en contraste, marcadas por el rezago y la pobreza secular. Hablamos de la Frailesca, Norte, Selva, Altos, así como la Sierra y el Soconusco, estás dos últimas claves para la seguridad nacional, dada su condición de Frontera Sur de México.
Fue así que el nuevo gobernador apuntó serio y determinado: “Hoy quiero que se escuche en cada rincón de Chiapas: La paz va a volver a reinar en nuestros caminos. La paz va a regresar a los caminos de Chiapas”, para luego y ante un escenario pletórico –en el cual le flanqueaban cual telón de fondo las imágenes del Rey Pakal y la Reina Roja, gobernantes de Palenque del antiguo imperio Maya clásico–, anunciar su compromiso de caminar de la mano con la presidenta Claudia Sheinbaum en beneficio de esta tierra: “Vamos a trabajar con ella con lealtad, con honorabilidad y con compromiso”.
Dijo el popular gobernante que asume como propios los ejes que ha convocado la presidencia: atender las causas de la inseguridad: inteligencia e investigación, colaboración con la federación y cero impunidad al delito. A lo cual añadió: “Mi gabinete de seguridad está a prueba, van a haber resultados porque todos los delitos del fuero común van a ser investigados entre la Fiscalía General del Estado y la Secretaría de Seguridad. Vamos con todo”, sentenció el gobernador de la nueva era de Chiapas, rematando enfático: “Aquí no hay derecho al miedo, la ley se va a aplicar”.
El nuevo líder de Chiapas que al inicio de su mensaje había manifestado que llegó a tiempo a la cita con su destino”, añadió: “Vamos a pacificar a Chiapas y Tabasco”, en alusión y saludo al gobernador de Tabasco, Javier May. “Cuento con la claridad, experiencia y valentía para asumir esta responsabilidad”, subrayó el hombre de Comitán de Domínguez.
Pidió al nuevo secretario de Seguridad que, con las nuevas reformas, la investigación de los delitos se realice junto con la Fiscalía General de la República. “Todo donde existan delitos, cobro de piso, asaltos en carreteras… vamos con todo. Aquí no hay derecho al miedo; la ley se va a aplicar”, enfatizó el mandatario ante miles de chiapanecos expectantes.
Ramírez Aguilar anunció que mejorará el salario de los policías, otorgará becas a sus hijos y les ofrecerá acceso a vivienda. También, que cambiará los mandos de sector en todo el estado y creará el Grupo de Reacción Inmediata Pakal, integrado por policías profesionales con buenos salarios, proximidad con los barrios y compromiso con la seguridad.
Eduardo Ramírez hizo énfasis en que volverá la paz a esa entidad desde la Selva hasta los Altos de Chiapas, para lo cual anunció la creación de una nueva fuerza de seguridad integrada por policías “muy bien pagados” y equipados con lo último en tecnología.
PROGRAMAS ESTRATÉGICOS
Ante expresiones de beneplácito, quien a partir de ayer es el nuevo gobernador, anunció la implementación de proyectos que en sexenios pasados han sido rechazados por las comunidades indígenas, como la carretera San Cristóbal de Las Casas-Palenque.
Al respecto, señalo que la moderna y estratégica vía “tiene una aproximación de 153 kilómetros, de los cuales en su primera etapa se construirán 96 (…) será a Palenque y pasará por los municipios de Salto de Agua Chilón y Ocosingo (…) No se va a concesionar a la iniciativa privada, las casetas van a ser administradas por las comunidades, las gasolineras van a pertenecer a las comunidades, los restaurantes van a pertenecer a las comunidades y los paradores turísticos y mercados. Para el mes de enero, vamos a tener los recursos para esa construcción”, remarcó el gobernador de la nueva era.
Otro proyecto estratégico que dio a conocer para su gobierno, fue el relativo a la creación de “la frontera sur industrial, un horizonte de oportunidades. Al respecto, señaló que ha visto cómo el nuevo gobierno de Estados Unidos de Norteamérica ha emplazado a México [en el tema de la contención migratoria internacional en la frontera sur]”. Y “nosotros, en medio de una crisis, vemos oportunidad y yo veo una gran oportunidad en Chiapas, particularmente nuestra frontera sur industrial, para que esa zona se decrete libre de impuestos”, y así sea un polo de atracción de industrias que quieran establecerse en la frontera”. Lo cual, añadió, será un incentivo para que migrantes se establezcan en esta región y no avancen a la frontera norte.
Entre los grandes beneficios que habrán de derivarse cuando la zona de la frontera sur obtenga la declaratoria como exenta de impuestos, con el apoyo del Congreso de la Unión y del accionar de los legisladores federales chiapanecos, está el que Tapachula se convierta en la capital económica de Centroamérica.
JAM ACH ULEL: EL HUMANISMO TRANSFORMADOR
Al cierre de su mensaje, quien es hoy el hombre del presente y del futuro de Chiapas, retomó la consigna iniciática de su propuesta política y de gobierno, esencia de lo que se ha llamado el HUMANISMO TRANSFORMADOR: JAM ACH ULEL. Una convocatoria ancestral de los pueblos originarios de Chiapas, para abrir las conciencias y el corazón y con base de valores, el colectivo chiapaneco pueda estar nutrido por mejores seres humanos, los cuales puedan caminar unidos y reconciliados hacia la paz duradera y el crecimiento y bienestar, sostenidos y sustentables.
Sin duda, el de ayer domingo fue un discurso alentador y a la altura de las expectativas generadas tras un proceso electoral de alcance histórico; un mensaje el cual puso de relieve la dote de política profesional, compromiso, determinación y capacidad de trabajo, que tiene el nuevo gobernador de Chiapas. Enhorabuena, porque lo siguiente, como lo dijo él mismo a manera de remate, es cerrar filas y trabajar para ganar la gran batalla de este tiempo de Chiapas; la paz y la seguridad. Sólo así se hará historia.