* Unos 600 extranjeros se organizaron para salir rumbo a la Ciudad de México; denuncian dificultades para permanecer en la frontera sur
Redacción / Alfaro Noticias
Alrededor de 600 migrantes de distintas nacionalidades, principalmente cubanos, se preparan para salir en caravana desde Tapachula durante la madrugada de este miércoles. Los participantes aseguraron que la falta de empleo, el alto costo de vida y los retrasos en la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) los obligan a caminar en grupo hacia la Ciudad de México.
La salida está programada a las cuatro de la mañana desde el Parque Bicentenario. El recorrido contempla pasar por Huixtla, Huehuetán, Escuintla, Villa Comaltitlán, Mapastepec, Pijijiapan, Tonalá y Arriaga, con el objetivo de llegar a Oaxaca y continuar hacia el centro del país.
Yamila Sarmiento, de 35 años y con ocho meses en México, explicó que permanecer en Tapachula se ha vuelto insostenible. “Tenemos que pagar renta, alimentar a los niños que dejamos atrás y aquí no nos brindan trabajo. No hay vida para los migrantes en Tapachula”, señaló.
Otros testimonios coincidieron en que la espera por documentos es larga y costosa. Migrantes relataron que han pagado a abogados sin obtener resultados y que incluso se han solicitado hasta 22 mil pesos para acceder a una entrevista en la Comar. “El que paga, resuelve. Pero aún pagando, a muchos nos han negado los trámites”, expresó un migrante que planea sumarse a la caravana.
También señalaron que los salarios en la región resultan insuficientes. “Trabajo en la construcción y me pagan muy poco, no alcanza para vivir aquí. Tapachula es muy caro para nosotros”, dijo otro de los participantes.
Además de las dificultades económicas, denunciaron redadas y operativos recientes en la ciudad. Por ello, afirmaron que viajar en caravana es una forma de protegerse. “Pedimos a las autoridades que nos acompañen para no correr riesgos en el camino”, expresaron.
De concretarse, esta será la sexta caravana que parte de Tapachula en lo que va de 2025. En redes sociales, se ha denunciado que durante algunos retenes del Instituto Nacional de Migración (INM) los agentes permiten el paso de los migrantes, mientras que en otros puntos los hacen descender de los autobuses y los trasladan a módulos de “rescate humanitario”. Estas inconsistencias han generado dudas sobre la aplicación de los protocolos en Chiapas.