Guillermo Ochoa-Montalvo
Querida Ana Karen,
La literatura suele pasar por ficción, verdades sorprendentes, inquietantes, inverosímiles, o aquellas otras que por su crudeza, se prefiere recurrir al cuento, la novela; incluso, a la poesía. Bruno Traven eligió la literatura para denunciar las condiciones de miseria, exclusión, explotación y saqueo de la gente en condiciones de hambre de inicios del Siglo XX; situación que prevalece de forma agravada hasta la fecha y dejó entrever, como anarquista que era, el derecho a la alimentación como un tema central en los debates sobre pobreza y miseria extrema.
La pobreza se puede sobrellevar cuando se trata de carencias materiales y falta de acceso a servicios básico, pero cuando la carencia es de alimentos y el hambre toca la puerta de miles de personas en Chiapas, entonces se habla del fondo del pozo más profundo. Y ese es el tema que Traven abordó en Macario.
Al vivir en Chiapas, se inspira en el cuento de los hermanos Green, “La Muerte Madrina” para publicar en 1950 su obra reconocida mundialmente, MACARIO. Traven, adoptó su obra al contexto del Virreinato en la Nueva España, introduciendo un toque mexicano y una atmósfera que fusiona el misterio, la fantasía y el realismo mágico a partir de la realidad del México posrevolucionario. La obra fue incluida en el libro “El Llano en Llamas” de Juan Rulfo publicada en 1953 y considerada como uno de los mejores cuentos del año por el New York Times en 1953.
MACARIO Y EL HAMBRE
La trama en Macario trata de un humilde leñador que, tras desear comerse un pavo entero, su esposa con grandes sacrificios le cumple el deseo de comer solo el pavo en medio del bosque. Sin embargo, recibe la visita del diablo y de Cristo a quienes no les convida del pavo; al diablo se lo niega para no caer en sus engaños y promesas de riqueza; y a Cristo, porque siendo tan milagroso, no lo necesita. Pero a la Muerte si le comparte la mitad de su pavo. La Muerte lo compensa llenando su guaje con agua milagrosas para curar a los enfermos, convirtiéndose en un gran poder pero también en una pesadilla.
Esa sensación de hambre y el deseo comer un pavo entero sin convidarle a nadie, expresa la eterna esperanza y fe de los pobres depositada en los poderosos como el Virrey quien lo amenaza de mandarlo a la hoguera en caso de no salvar a su hijo de la muerte. El diablo, Cristo y la Muerte simbolizan la ambición, la esperanza y la caridad.
Esta situación de hambre y desigualdad social en Chiapas que muestra el desprecio hacia los indígenas y las brechas sociales entre blancos, mestizos e indigenas. El pavo representa el sueño de aquellos que luchan por la subsistencia y alcanzar algún día sus deseos de plenitud sin saber que eso es justamente la cadena que los mantiene esclavizados. La obra simboliza la lucha contra el hambre y la desigualdad social, temas que se reflejan en el contexto de Chiapas y en las condiciones de vida de la población indígena en toda su historia.
TRAVEN Y MACARIO
En “Macario” de B. Traven, el hambre simboliza la opresión y la desigualdad social que sufre la clase pobre, mientras que el personaje de Macario representa al hombre que, desde su extrema miseria, busca una manera de reclamar un destino y una vida digna. El deseo obsesivo de Macario de comer solo un pavo es la manifestación de un anhelo profundo por tener un control sobre su vida y satisfacer sus necesidades más básicas, una aspiración que se convierte en una lucha contra el destino y contra el sistema que lo oprime.
El hambre constante de Macario y su familia ilustra la pobreza extrema y heredada que los aprisiona. La falta de recursos básicos no es solo una condición física, sino una forma de sometimiento a las estructuras sociales. El hambre lleva a Macario a una profunda resignación y una sensación de falta de control sobre su destino. Su obsesión por el pavo es la desesperación de quien no tiene lo mínimo para vivir, y su vida gira en torno a esta carencia. La obra critica cómo los pobres son culpabilizados y marginalizados por su situación. El hambre, en este sentido, es un producto de la desigualdad social, y Macario es una víctima que busca liberarse de ella.
A pesar de su humilde condición, Macario representa la dignidad del hombre frente a la adversidad. Su encuentro con la Muerte se presenta como una oportunidad para rebelarse contra su destino. El anhelo de Macario por el pavo no es simple gula, sino un grito por una vida donde pueda satisfacer sus necesidades más elementales y disfrutar de un momento de plenitud. Macario se niega a compartir el pavo con la autoridad divina o demoníaca, pero sí lo comparte con la Muerte, mostrando su lucha por la autonomía. Esta postura es un reflejo de la resistencia del pueblo ante el sometimiento. Macario es la historia de la. Pobreza y el hambre desde la upo virreinal hasta nuestros días.
IDENTIDAD DE BRUNO TRAVEN
La identidad verdadera de Bruno Traven sigue siendo un misterio después de adoptar una cantidad enorme de seudónimos, algunos de ellos, sustentados en documentos oficiales por lo que su fecha de nacimiento es confusa entre el 9 de octubre de 1882 o el 23 de febrero de 1890, de acuerdo a diversos documentos.
Traven llegó exiliado a México. En 1919 fue hecho prisionero por por su participación en la fracasada Revolución de Baviera que trataba de establecer un gobierno comunista en Munich. Alrededor de 1924 fue liberado de la prisión de Londres y viajó al continente americano.
Traven vivió en Tampico, Acapulco y otros lugares de México hasta establecerse en Chiapas. El temor a ser perseguido por los alemanes sugiere el motivo por el cual adoptó tantos seudónimos. Recibió la ciudadanía mexicana el 3 de septiembre de 1951.
ROSA ELENA LUJÁN Y ESPERANZA LÓPEZ MATEOS
Para el año de 1940, Traven entabla amistad laboral con Esperanza López Mateos, hermana de Adolfo López Mateos que a la postre, sería presidente de México en 1958. Para ese entonces, las obras de Traven ya gozaban de popularidad y fue doña esperanza López Mateos quien traduciría ocho libros de Traven al español convirtiéndose en su representante y quien lo vincularía con Rosa Elena Luján.
Para ese entonces, Traven escribía y al mismo tiempo, se hacia pasar como representante de Traven, o sea, de él mismo. En 1957, contando con películas exitosas, se casa con Rosa Elena Luján en Estados Unidos y de ahí, parten a la Ciudad de México donde crean la Agencia Literaria R.E. Luján.
Rosa Elena Luján declaró, 12 años después de su boda que los padres de Traven habían emigrado de Estados Unidos a Alemania tiempo después del nacimiento de su hijo.Y mientras los editores lo identificaban como Hal Croves; los investigadores como Traven Torsvan, su esposa aclaró el día de su muerte en la ciudad de México el 26 de marzo de 1969, que el verdadero nombre de su esposo era TRAVEN TORSVAN CROVES, que había nacido en Chicago el 3 de mayo de 1890, hijo de Burton Torsvan de ascendencia noruega y Dorothy Croves de ascendencia anglosajona.
MACARIO EN EL CINE
En 1960 Macario llegó al cine bajo de dirección de Roberto Gavaldón; la actuación de IgnacioLópez Tarso y Pina Pellicer para quedarse como un testimonio de gratitud a Chiapas y una cuestión de amor.
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