Juan Carlos Cal y Mayor
Cuando observo el rostro de los venezolanos migrantes famélicos con sus hijos en brazos pidiendo apoyo económico en las calles de nuestra ciudad al igual que en muchas partes de nuestro país, no puedo sentir más que coraje contra los líderes socialistas en América Latina que los han obligado a huir de sus países. No es casualidad que la mayoría provengan de Cuba o Venezuela. El socialismo bajo diferentes facetas se ha convertido en un cáncer empobrecedor que se ha enquistado en nuestra América. Ha instalado a tiranos que al igual que su corte viven en la opulencia.
LA LITTLE VENEZUELA
El exclusivo barrio de Salamanca en Madrid está abarrotado por venezolanos. Son hijos y familiares de la élite política y militar, que ha optado por los placeres primermundistas en un país en se habla el mismo idioma. Primero emigraron a Miami donde se calcula que han comprado unos 2 mil millones dólares en condominios. Ahora el barrio madrileño tiene el mote de la “Little Venezuela”. ¿No es acaso ofensivo que millones de cubanos y venezolanos arriesguen la vida para vivir el sueño americano? ¿Cómo es eso de que “el imperialismo yanqui” sea el lugar donde prefieren huir?
LAS ÉLITES
También pasea en yates de lujo y aviones privados un nieto socialité de Fidel Castro, el adorado líder que la izquierda mexicana no deja de rememorar. También vive en una lujosa mansión en los EU la hija de Hugo Chávez, heredera de una enorme fortuna en millones de dólares. No es casualidad que la famosa “casa gris” de Houston se convirtiera en la evidencia de la mayor hipocresía de nuestro régimen que clama “primero los pobres”. Cosa curiosa el ver cómo las cúpulas izquierdistas se la pasan de shopping en las tiendas de marca del gabacho. Es la verdad pura y dura, pero el pueblo cree como dogma que todo es una malsana invención.
LA MAREA ROJA
La mancha roja ha invadido Latinoamérica y por eso la izquierda caviar estaba de fiesta celebrando. Lula volvió a Brasil, Petro ganó en Colombia y Gabriel Boric en Chile. Los dos últimos han resultado un fiasco. Petro en su primer año ya cuenta con 61% de desaprobación y Gabriel Boric ronda el 65%. Uruguay y Paraguay son los únicos dos países de la región que se han salvado de la izquierda. Nayib Bukele se llegó a afirmar como socialista pero ahora ha sentado las bases para que su país pueda prosperar. El Salvador dejó de ser el país más inseguro de América Latina en cuanto Bukele encarceló a más de 60 mil integrantes de la Marasalvatrucha. Contrasta con esa izquierda esa victimiza a los delincuentes, es aliada Irán, el tirano de Norcorea y el movimiento terrorista de Hamás. Ahora acusan a Bukele de ser represor, aunque goza de 95% de popularidad.
MUJICA
El uruguayo Pepe Mujica fue un gobierno de izquierda bastante excepcional. Es admirado por sus reflexiones y estilo de vida, ese sí un auténtico franciscano que vive en su “chacra” una modesta vivienda en las afueras de Montevideo y no tiene parientes ni descendientes de quienes avergonzarse. “Gente como esta resuelve problemas que yo no tengo ni capacidad ni fuerza para poder resolver… Seré socialista pero no quiero ser bobo… Si por querer repartir, exprimo demasiado tengo menos pa´ repartir”, dice refiriéndose a los empresarios de su país.
ARGENTINA
Hace poco más de un siglo Argentina llegó a ser la primera economía del mundo, pero muy poco les duro el gusto. Siendo un pueblo culto y europeizado -dicho sin discriminar- cayó en manos del populismo. Primero con Juan Domingo Perón y luego Evita a la que casi sacralizaron. Entre populistas y regímenes militares, luego llegó el kirchnerismo. Un presidente, Nestor Kirchner que con medidas populistas y asistencialistas disparó en su popularidad en la misma proporción en que hundió a su economía. Después llegó su señora que ahora es senadora y vicepresidenta con probadas acusaciones de corrupción. Puso a un títere en la presidencia, Alberto Fernández y hoy la economía está por los suelos. Una tierra colonizada por europeos cuyos descendientes ahora huyen también de su país.
REBASE POR LA DERECHA
Habría que preguntarse como Cuba, Venezuela y Argentina que fueron países en vías de desarrollo pasaron a ser tan pobres y la respuesta ya se sabe. Solo que ahora, aunque tarde para la política, ha dado un repentino giro apostando por las ideas liberales y el excesivo hartazgo. Daniel Novoa, un joven empresario de 35 años, acaba de ganar la presidencia de Ecuador a una candidata impuesta por el prófugo expresidente de izquierda Rafael Correa.
En los próximos días, el 22 de octubre un candidato liberal, el economista pro libre mercado Javier Milei, reafirmará su victoria en las elecciones primarias, sino será en la segunda vuelta. María Corina Machado, la líder opositora venezolana, librará en primerísimo lugar las elecciones primarias para convertirse en la rival más fuerte del dictador Maduro. Todo apunta a un giro radical que de concretarse traerá una nueva época económica que deje de una vez por todas atrás la demagogia socialista. Y hay que estar atentos porque eso puede ser una gran señal para México en la próxima elección presidencial.
