Rodulfo Reyes
El viernes 5 de junio que el presidente Andrés Manuel López Obrador llegue por carretera a Villahermosa, estaría empezando el punto más alto de la pandemia, de acuerdo con un estudio matemático de un científico de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT) que ha sido certero con las previsiones de casos de COVID-19.
Según ese pronóstico, a finales de la primera semana de junio y principios de la segunda, se estaría alcanzando la parte más crítica de la emergencia sanitaria.
El modelo matemático diseñado por el catedrático e investigador Fidel Montejo-Ulín, de la División Académica de Ciencias Básicas (DACB), advierte la necesidad de que la población mantenga las medidas de higiene, protección, distanciamiento y aislamiento.
El experto predijo que el 23-24 mayo habría un máximo de tres mil 200 casos en Tabasco, y el reporte técnico diario de la Secretaría de Salud de esos días refiere tres mil 148 casos, lo que arroja una precisión estadística milimétrica.
Ese científico es quien advierte que el día que el de Tepetitán llegue de Cancún por carretera a la capital tabasqueña, estaría por iniciar el periodo más trágico por el coronavirus.
De acuerdo con sus recomendaciones, es cuando más se debe cumplir las restricciones de la Secretaría de Salud.
En otras condiciones, sería aplaudida una visita del mandatario, pero por la situación no es recomendable, pues en giras anteriores se presentaron llenos impresionantes en los lugares donde acude.
Ayer, el de Tepetitán anunció en su rueda de prensa mañanera que la próxima semana contempla reiniciar sus giras por la nación, empezando en el sureste para dar el banderazo a las obras del Tren Maya.
“Es muy probable que salga a partir del inicio de la nueva etapa, tengo que estar aquí (en la capital del país) hasta el domingo, cumplir a que se termine la etapa de sana distancia, pero a partir del lunes (1 de junio) es muy probable que, con todos los cuidados, inicie una gira por el país”, aseveró.
“Si estoy aquí (en la Ciudad de México) cuidándome, puedo también estar en cualquier estado cuidándome y aprovecho para ver cosas, necesitamos ir regresando poco a poco a la nueva normalidad, insisto, con cuidado”, explicó.
Refirió que si la línea área en que se traslade tiene uso obligatorio de tapabocas, se lo pondrá.
De acuerdo con ese plan, López Obrador estará dentro de dos viernes en Villahermosa, en donde dará su conferencia de prensa matutina y al mediodía evaluará los trabajos de la refinería de Dos Bocas.
El presidente dijo que tendrá reuniones con no más de 50 personas.
En la entidad, la primera reacción en contra fue del dirigente estatal del PAN, Pedro Gabriel Hidalgo Cáceres, quien calificó de “irresponsable” la actitud del jefe del Ejecutivo federal.
“Sería la décimo-tercera vez que viene al estado y la verdad es que hasta ahora no ha sido de beneficio, no ha traído nada”, señaló ayer en una rueda de prensa.
Este miércoles, según publicó en su cuenta en Twitter, el gobernador Adán Augusto López Hernández también retomó sus giras de trabajo por el interior del estado.
En su tuit, indicó que, acompañado de la alcaldesa Lorena Méndez Denis, y de Luis Romero Gurría, secretario de Obras Públicas, supervisó los avances de la construcción del boulevard Otto Wolter.
Su oficina de prensa difundió que en todo momento López Hernández usó cubrebocas y mantuvo su sana distancia.
La “nueva normalidad” arrancará en Tabasco en un momento peligroso.
