RODULFO REYES
Al campechano Alejandro Moreno Cárdenas, candidato de la ‘cargada’ del PRI a la dirección nacional de este partido, le conviene agrupar al priísmo en Tabasco por ser la tierra del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Es por esa misma razón que los medios informativos de la Ciudad de México mantienen bajo la lupa al Edén, compenetrándose en asuntos tabasqueños a tal grado que todo lo relacionado con la cuna de AMLO lo vuelven tema de la agenda del país.
Ayer, el extitular de Caminos y Puentes Federales (Capufe), Benito Neme Sastré, vino a desayunar a Villahermosa con excolaboradores de su padre, el desaparecido exmandatario Salvador Neme Castillo, y “casualmente” le reiteró su apoyo a Moreno, cuyo apodo ‘Alito’ se ha degenerado en ‘Amlito’ por los señalamientos de los mismos priístas de estar apoyado por AMLO.
La ‘cargada’ con el gobernador con licencia de Campeche se ve y se siente.
De igual forma este martes la diputada federal Soraya Pérez Mungía manifestó, en una entrevista de radio, su adhesión a la causa de Moreno.
La cardenense Pérez Mungía es el cuadro priísta con mayores adhesiones para ser la nueva presidenta del partido, pese a que el exdelegado del Infonavit, Nicolás Bellizia Aboaf, considera que si ‘Alito’ o ‘Amlito’ gana la presidencia del CEN, él será en automático el relevo de Pedro Gutiérrez Gutiérrez.
AMAGA ERUBIEL CON DEMANDAR AL COLUMNISTA
Sobre la sucesión en el PRI, el expresidente estatal de este partido, Erubiel Alonso Que, amenazó ayer a este reportero con demandarlo.
En este espacio se afirmó en la entrega de este martes que Erubiel es propietario de una docena de empresas del ramo llantero y que cuando entró como responsable del comité directivo estatal de su partido no tenía esas propiedades.
Aquí el escrito enviado por el exdiputado local al reportero:
“He leido con atención su análisis en razón a la renovacion de la Dirigencia Nacional del PRI, eso no me ocupa ni me preocupa. Lo que responsabilizo a usted responsable inmediato es en razón a la mención que hace donde refiere que soy propietario de una decena de llanteras, si algo le ocurre a mi familia o aun servidor en temas de seguridad. Tabasco es de los estados con mayor incidencia de secuestros del país. Le suplico como padre de dos hijos que en sus temas de analisis no vulnere la seguridad de mi familia. Si vuelve a ocurrir presentare en la instancia competente algun recurso. Lo único que pido como Padre de Familia es seguridad para mis hijos a quienes amo con todas mis fuerzas (SIC)”.
Hasta ahí la amenaza del priísta, cuyo texto se respeta con las incoherencias gramaticales y faltas de ortografía.
En 2015, Erubiel fue acusado públicamente de robarse el dinero que le pidió a algunos priístas que aspiraban a un cargo de elección popular.
Esa situación detonó escándalos públicos de los que hay constancia en los medios.
Entre otros, lo buscaron para agredirlo físicamente Armín Marín, a la sazón presidente municipal de Emiliano Zapata, quien le habría dado dos millones de pesos para que un allegado suyo fuese nominado candidato.
También se sabe que Aquiles Reyes Quiroz, de Centla, estuvo a punto de golpearlo en el hotel Hilton.
En el mismo tenor Braulio Exequias, ahora diputado de Morena, lo encaró, e igualmente su papá se le fue encima.
En torno la existencia de las llanteras de Erubiel Alonso, las autoridades son las que deben determinar si la inversión en ellas es producto de los recursos que presuntamente recibió a cambio de candidaturas o si salió del dinero que ha ganado lícitamente el exlegislador.
Las llanteras que tiene el expresidente del PRI son del dominio público y esto se puede demostrar.
La Secretaría de Hacienda tiene la última palabra.
