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Ruperto Portela Alvarado.
PRI, UNA MUERTE ANUNCIADA…
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Entre la petulancia y soberbia, combinada de corrupción e impunidad, el Partido Revolucionario Institucional, terminó como la viuda de barrio, sin la compañía del amante que representaban el presupuesto y el gobierno; pero también en el total abandono de todos aquellos que le juraron amor eterno, pero que succionaron las miles de sus siglas.
Esto no sorprende porque como dijo el ex Presidente ENRIQUE PEÑA NIETO, “es la naturaleza humana de los mexicanos”. Creo que se refería a la de ser traidor a sus raíces como en este caso del partido que les dio poder, dinero, puesto y cargos públicos. Eso mismo le va a suceder a Morena y su “Jefe Supremo”, ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, porque como dice la máxima callejera: “no lo quieren a él, sino al poder, el dinero y lo que representa en estos momentos para quienes le rinden pleitesía, honores y lealtad ciega; pero cuando sus necesidades cambien, así de fácil cambian sus lealtades”.
Pero no desviemos el tema que es el PRI y sus males estomacales que lo tienen al borde de la muerte, duelo y sepultura. “Alito” o mejor dicho “Amlito”, ALEJANDRO MORENO CÁRDENAS, no representa nada para el partido, pero es el dirigente nacional que manda y dispone de todas las prerrogativas para decidir lo que se va a hacer en ese instituto político, aunque todo le resulta mal. Y además, quiere ser el candidato a la Presidencia de la República, sin ver la experiencia y, cómo le fue a ROBERTO MADRAZO PINTADO, por su necedad de aspirar a ser el mandatario de este país.
Pero regresemos a Chiapas donde el PRI es un cascarón que su dirigente actual, RUBÉN ANTONIO ZUART ESQUINCA, no entiende que tiene que sumar y no restar como lo está haciendo al pelearse con los priistas de corazón, quienes a pesar del lastre que representa la otrora aplanadora, siguen de corazón vistiendo la camisa roja.
RUBÉN ZUART es un tramposo y no niega la cruz de su parroquia. Es producto defectuoso de quienes lo protegieron en su nacimiento político como el “Talibán” JULIÁN NAZAR MORALES, el del estigma de pendenciero, corrupto, ejemplo de inmoralidad e impunidad. No menos ADN tiene el “Chiquilín Zuart” de sus anteriores protectores residentes del averno: ROBERTO ARMANDO ALBORES GUILLÉN “El Satanás” y ROBERTO ALBORES GLEASON, “El Diablito”. Con esos maestros, no se podía pedir mucho de este dirigente priísta.
En el escenario futuro, queda pendiente un resolutivo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) o en su caso del Tribunal Electoral del Estado de Chiapas, en el que seguramente fallarán a favor de la inconformidad presentada por ALFREDO ARAUJO ESQUINCA y en contra de RUBÉN ZUART, que llevará a que este abusivo personaje, desaloje el edificio de Santo Domingo y se convoque a una nueva elección de la dirigencia estatal del PRI.
Casi estoy seguro que a RUBÉN ANTONIO ZUART ESQUINCA, le darán palo porque se está quedando solo y sin la protección de su dirigente nacional, ALEJANDRO MORENO CÁRDENAS, quien hoy negocia con WILLIAMS OSWALDO OCHOA GALLEGOS, mejor conocido por el sobre nombre de batalla: el WILLY OCHOA, para que se haga cargo de lo que queda de la otrora aplanadora electoral.
Desconocido (supongo) ZUART ESQUINCA y dada la convocatoria para la elección de la nueva dirigencia, lo más seguro es que desde el edificio nacional del PRI se dé línea para que WILLY OCHOA entre al quite, cumpliendo su objetivo y haciéndole su gusto, porque eso es lo que siempre ha querido el hijo de “La Burundanga” desde que combatió al “Diablito Albores” con su organización “Reflexión Política”.
Hay que consignar los antecedentes de la caída del PRI a nivel nacional desde que el Presidente ERNESTO ZEDILLO PONCE DE LEÓN vendió el partido al PAN y VICENTE FOX QUESADA con el objetivo de blindarse de todas sus tropelías y actos de corrupción. En Chiapas, con la llegada de JOSÉ PATROCINIO GONZÁLEZ BLANCO GARRIDO Y CANABAL, el PRI quedó al garete, sin subvención presupuestal y en completo abandono.
PATROCINIO empezó por devaluar y debilitar a los tres sectores principales del Revolucionario Institucional, en especial a la Confederación Nacional Campesina (CNC) que en Chiapas era bastión de votos para el tricolor. Lo mismo hizo con la CNOP (Confederación Nacional de Organizaciones Populares) y por consiguiente a la Confederación de Trabajadores Mexicanos (CTM). Los ahorcó y literalmente los desapareció del escenario electoral, a tal punto, que hoy son fantasmas que recorren la geografía chiapaneca, sin ningún valor político.
En ese escenario, todavía hay priístas que le tienen amor a la camisa roja que los representa y no como aquellos que habiendo usufructuado las siglas y el poder del Revolucionario Institucional siendo diputados, senadores, alcaldes y gobernadores del Estado, traicionaron sus estatutos y principios.
En Chiapas se puede ejemplificar todo lo dicho sobre la mediocridad y casi desaparición del PRI, desde la dirigencia de ROBERTO ALBORES GLEASON por más de nueve años, coludido y a las órdenes del Gobernador MANUEL VELASCO COELLO por sus ansias y ambición de ser el sucesor obligado al creer que el GÜERO VELASCO le sería fiel y apoyaría en su candidatura. Lo que resultó falso, contrario y perverso, porque “el hijo de la Reina Roja”, se fue por el lado de su cómplice OSCAR EDUARDO RAMÍREZ AGUILAR y luego con Morena para impulsar a RUTILIO CRUZ ESCANDON CADENAS.
El otro paso hacia la muerte del PRI lo interpretó el famoso boca-floja, JULIÁN NAZAR MORALES, el nefasto “Talibán”, quien estuvo casi cuatro años al frente de la dirigencia estatal del PRI-Chiapas. También este sujeto de malos antecedentes y ampliamente conocido por su tracalerías, corruptelas y enriquecimiento ilegal explicable, se alió a la cofradía del GÜERO VELASCO, siendo inclusive, Secretario del Campo, en esa administración verde-imberbe de alto nivel de corrupción, donde se le acusa de un fraude por más de 400 millones de pesos.
Ahí es donde entra la figura fantasmal del WILLY OCHOA para erigirse en el Presidente del Comité Directivo Estatal del PRI, que seguramente alcanzará con la venia de su “amigo” y dirigente nacional, ALEJANDRO MORENO CÁRDENAS, al que en últimas fechas ha acompañado en actos políticos de diversos Estados de la República. Pero también llama la atención su reaparición después de haber perdido la elección a la Presidencia Municipal de Tuxtla Gutiérrez y andar visitando colonias de esta capital y otros municipios de la entidad.
Algo está tramando “La Burundanguita” WILLY OCHOA, porque no creo que dé a gratis y buena gente ande reuniéndose con los colonos, llevándoles regalos y un cúmulo de promesas, que dicho de paso, otros no hacen ni siquiera eso. Pero insisto y confirmo: la meta inmediata de este aliado y operador de las triquiñuelas y violaciones a la constitución, MANUEL VELASCO COELLO, es la dirigencia estatal del PRI que le arrebatará a RUBÉN ZUART ESQUINCA, con toda seguridad…
Se acabó el mecate… Y ES TODO…
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MIEMBRO DE LA ASOCIACIÓN DE COLUMNISTAS CHIAPANECOS. A. C.
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