Innovación, ciencia y voz propia: así se vivió el curso de comunicación para biotecnólogos en el TecNM Tuxtla Gutiérrez

• El curso tuvo una duración intensiva de 40 horas y se centró en un reto tan urgente como vigente: traducir los avances científicos en mensajes claros, breves y atractivos.

Carlos A,. Jiménez Vázquez

Del 30 de junio al 4 de julio, el Instituto Tecnológico Nacional de México, campus Tuxtla Gutiérrez, fue sede de una experiencia inédita: el Primer “Curso de Comunicación y Divulgación para Biotecnólogos”, una propuesta pionera que fusionó ciencia, tecnología y narrativas digitales con un enfoque estratégico de alto impacto.

Dirigido a docentes e investigadores de posgrado del área biotecnológica, el curso tuvo una duración intensiva de 40 horas y se centró en un reto tan urgente como vigente: traducir los avances científicos en mensajes claros, breves, atractivos y con capacidad de incidencia pública.

Comunicar ciencia con estrategia
El objetivo fue claro: capacitar a profesionales de la biotecnología para que puedan comunicar eficazmente sus proyectos, empleando herramientas de inteligencia artificial, técnicas de storytelling y producción multimedia de última generación. Todo ello enmarcado dentro de una lógica estratégica basada en modelos de negocios adaptados al ámbito científico.

En un entorno donde la biotecnología avanza a pasos agigantados —y donde la desinformación también prolifera—, este curso vino a llenar un vacío esencial: formar científicos capaces de explicar lo complejo con claridad y emoción, aprovechando plataformas digitales como aliadas clave en la construcción del conocimiento colectivo.

Un recorrido intensivo por la comunicación científica moderna
Dividido en tres bloques temáticos, el curso ofreció una estructura teórico-práctica. Inició con fundamentos de comunicación científica y storytelling, en donde los participantes aprendieron a construir guiones efectivos y a expresarse oralmente con seguridad frente a la cámara. A partir de ahí, se introdujeron en el mundo de la producción multimedia, creando cápsulas breves estilo reel mediante el uso de CapCut, técnicas de grabación con celular y elementos de branding visual.

Uno de los momentos más innovadores fue el uso de inteligencia artificial generativa. A través de herramientas como ChatGPT, Gemini y Deepseek, los participantes experimentaron la creación de voces artificiales, generación de imágenes y optimización de textos y videos, demostrando cómo la IA puede ser un aliado clave en la eficiencia de la divulgación científica.

Finalmente, el módulo de estrategia de proyectos dotó a los asistentes de recursos de planeación como el Business Model Canvas, metodologías GTM (Go-To-Market) y estrategias para presentar sus ideas a posibles patrocinadores. El broche de oro fue una presentación final pública, donde cada participante expuso su cápsula terminada, su plan estratégico y recibió retroalimentación profesional.

Facilitadores con trayectoria nacional
La calidad del curso se vio reforzada por la experiencia de un equipo multidisciplinario de facilitadores. Carlos A. Jiménez Vázquez, periodista premiado a nivel nacional por su labor en divulgación científica y ambiental; Héctor de la O Santana, empresario e ingeniero con visión estratégica; y Elías Barrera Nieto, especialista en inteligencia artificial y marketing digital, ofrecieron una guía integral que combinó ciencia, técnica y visión de negocio.

Una apuesta por el conocimiento abierto
Más allá de las herramientas adquiridas, el curso dejó una enseñanza poderosa: la ciencia no solo debe descubrir, sino también contar, emocionar y transformar. En un mundo marcado por desafíos ambientales, energéticos y de salud pública, formar científicos que comuniquen con eficacia es una inversión social de largo alcance.

Como parte del reto final, los reels generados fueron publicados en redes sociales con el objetivo de alcanzar al menos 50 visualizaciones en tres días. Esta actividad buscó anclar el aprendizaje en el terreno real de la divulgación digital, con métricas e impacto tangible.

Un modelo replicable
Este curso representa un modelo formativo replicable para otras instituciones del país, que buscan empoderar a sus investigadores como voceros públicos del conocimiento científico. En un momento histórico donde las herramientas digitales están al alcance de todos, formar comunicadores de la ciencia no es una opción, sino una necesidad.

Con esta experiencia, el TecNM campus Tuxtla Gutiérrez se coloca a la vanguardia de la innovación educativa en el sur del país, apostando por una biotecnología con rostro humano y voz propia, capaz de conectar con la sociedad y de contribuir activamente al cuidado del medio ambiente.