* Autoridades de Tabasco señalaron que un funcionario federal habría colaborado con la organización ligada al CJNG, mientras un empresario denunció ante la FGR intentos por relacionarlo con el grupo para despojarlo de su negocio
La Fiscalía General del Estado de Tabasco reveló que el grupo criminal conocido como La Barredora habría penetrado estructuras de la Fiscalía General de la República (FGR) con el apoyo de un funcionario identificado únicamente como “Rosete”, alias El Yanqui. La información se dio a conocer durante una audiencia judicial en la que se expusieron cinco reportes de inteligencia del Ejército que vinculan al exsecretario de Seguridad Pública de Tabasco, Hernán Bermúdez Requena, con esta organización delictiva.
De acuerdo con los fiscales, La Barredora surgió a finales de 2017 con el objetivo de controlar actividades como el trasiego de hidrocarburos, la extorsión y el secuestro en el sureste del país, operando en alianza con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Los reportes señalan que Bermúdez, apodado El Abuelo, habría incorporado a integrantes del grupo en áreas de inteligencia y seguridad estatal, facilitando sus operaciones durante su gestión.
Entre los nombres mencionados figuran El Tomacín, El Mamado y El Pelón de Playas, quienes, según la investigación, participaron en disputas internas por el control del territorio. Documentos militares y de la Fiscalía local describen también operaciones financieras presuntamente vinculadas al lavado de dinero mediante empresas registradas en Villahermosa.
El caso se originó tras la denuncia del empresario Ramón Martínez Armengol, propietario de la gasolinera ParaGas, quien aseguró haber sido víctima de secuestro y despojo por miembros de la organización. Martínez relató que fue obligado a firmar un poder notarial para ceder el control de su negocio bajo amenazas de muerte.
Paralelamente, un empresario que permanece bajo protección federal presentó una denuncia ante la FGR en Yucatán, en la que acusó a particulares y funcionarios municipales de intentar relacionarlo con La Barredora para despojarlo de su patrimonio. En su declaración, el denunciante, inscrito en un programa de protección de testigos, aseguró que existe una “campaña de noticias falsas” que busca vincularlo con la organización criminal.
El empresario afirmó que esta información, difundida en redes sociales y grupos de mensajería, pone en riesgo su vida y la de su familia. Por ello, pidió a la FGR investigar el origen de los mensajes y la autenticidad de los datos que lo asocian con el grupo delictivo.
Ambas investigaciones, la de Tabasco y la radicada en Yucatán, se desarrollan de manera paralela y podrían aportar nuevos indicios sobre la estructura y las posibles redes de protección institucional de La Barredora, considerada una escisión de antiguos operadores de Los Zetas y actualmente vinculada al CJNG en el sureste del país.