* La autoridad electoral destacó que los avances podrán ser consultados en tiempo real y observados directamente por la ciudadanía.
El Instituto Nacional Electoral (INE) comenzará el cómputo distrital de las elecciones judiciales inmediatamente después del cierre de casillas el 1 de junio, marcando un hecho sin precedentes. Este proceso, que no debe confundirse con el PREP ni con un conteo rápido, permitirá ofrecer resultados definitivos desde el mismo día de la jornada electoral, según informó la consejera presidenta Guadalupe Taddei. Los avances podrán ser consultados en tiempo real y observados directamente por la ciudadanía.
El traslado de los paquetes electorales a las 300 sedes distritales dará paso a un calendario escalonado de cómputos que se extenderá hasta el 10 de junio. Primero se contarán los votos para ministros de la Suprema Corte (del 1 al 3 de junio), luego para magistraturas de diversos tribunales y, finalmente, para jueces de distrito. La participación ciudadana como observadora también está contemplada en cada etapa del proceso.
Sin embargo, el proceso no ha estado exento de controversias. El Consejo General del INE decidió no cancelar las candidaturas de 26 aspirantes señalados por el Congreso como no idóneos, algunos incluso vinculados a presuntos actos delictivos. Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, reconoció que algunos perfiles con antecedentes cuestionables fueron incluidos en las listas enviadas por esa cámara.
La consejera Carla Humphrey explicó que el INE no es responsable del registro de dichas candidaturas, ya que esa etapa correspondió al Poder Legislativo. Añadió que la institución solo evaluará la elegibilidad de quienes resulten electos antes de entregarles sus constancias de mayoría. Además, recordó que existen mecanismos como la fiscalización de campañas, que podrían derivar en la cancelación de candidaturas en caso de detectarse irregularidades graves.
Por otro lado, el INE también enfrenta desafíos para garantizar la paridad de género en los distintos cargos judiciales, según indicó la consejera Rita Bell López-Vences. Aunque la reforma judicial establece criterios de equidad, las cifras muestran un desequilibrio: hay más hombres que mujeres aspirando a los cargos de jueces y magistrados, especialmente en áreas especializadas como penal, laboral o administrativa.
Bell López-Vences, quien preside la comisión de Género del INE, reconoció que uno de los principales retos ha sido lograr un balance en la representación de género dentro de las boletas por especialidad. A pesar de los esfuerzos institucionales, las diferencias numéricas entre aspirantes hombres y mujeres reflejan los límites del sistema actual y abren el debate sobre cómo mejorar la inclusión en futuras elecciones judiciales.