* “Si hay un derramamiento de sangre, será responsabilidad del gobierno”, advirtieron.
Redacción / Alfaro Noticias
Los pobladores del municipio de Tila, Chiapas, denuncian que desde el pasado viernes la zona está bajo el control de un grupo criminal que ha sitiado las entradas y salidas de la comunidad. Los habitantes acusan a las fuerzas federales de no actuar para desarmar a los delincuentes responsables de la crisis de desplazados.
Según los ejidatarios de Tila, la situación ha destruido la vida del pueblo y ha dejado a la comunidad sin luz, sin señal telefónica y con escasez de alimentos. En un comunicado, exigieron la intervención urgente del gobierno de México y la presencia permanente del Ejército y la Guardia Nacional para restablecer la seguridad. También pidieron emitir órdenes de detención contra los líderes de los grupos criminales y recuperar los accesos al municipio.
El comité Digna Ochoa informó que la tensión persiste en Tila debido a las omisiones de todos los niveles de gobierno y la falta de acción de las fuerzas de seguridad. Además, destacaron que menos de mil personas aún se niegan a regresar a sus hogares por temor a la violencia, a pesar de que la mayoría de los desplazados han vuelto.
A un mes de que un grupo armado quemara 17 casas y 21 vehículos, dejando tres muertos y cuatro heridos, el comercio en Tila está operando al 70 por ciento. Sin embargo, los pobladores están esperando la realización de peritajes para la reconstrucción de las casas dañadas y los negocios saqueados.
Ante los rumores de que las fuerzas de seguridad se retirarán de Tila, los habitantes confían en que el Ejército permanecerá para brindarles seguridad. Mientras tanto, se están instalando 80 lámparas en puntos estratégicos del municipio para mejorar la seguridad nocturna. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) continúa dando mantenimiento a la red eléctrica, aunque se prevé que este trabajo tardará en completarse. Con información de Proceso y Milenio.
