* El paquete económico prioriza inversión física y programas sociales, mientras organizaciones civiles advierten retrocesos en la protección ambiental y en la atención a mujeres víctimas de violencia
El gobierno de Claudia Sheinbaum presentó el proyecto de presupuesto federal para 2026, que contempla un gasto total de 10.2 billones de pesos, casi un billón más que en el año en curso. De acuerdo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, se trata de un paquete responsable que garantiza los programas sociales, el desarrollo económico y la estabilidad financiera.
Uno de los rubros más destacados es la inversión física, con una asignación de 1.3 billones de pesos, cifra calificada por el vicecoordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Alfonso Ramírez Cuéllar, como “sin precedentes”. Según el legislador, estos recursos se destinarán principalmente a infraestructura, vivienda y programas de agua, lo que permitirá cumplir las metas sexenales en materia de desarrollo urbano.
No obstante, organizaciones ambientales y colectivos han manifestado preocupación por la forma en que se distribuyen los recursos. De acuerdo con la coalición Noroeste Sociedad Civil para la Sustentabilidad Ambiental, el presupuesto para la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas será el más bajo en más de dos décadas, con alrededor de 52 millones de dólares, lo que equivale a que cada hectárea protegida reciba en promedio poco más de 10 pesos al año.
Especialistas también advierten que más del 90 por ciento de los fondos etiquetados para cambio climático y transición energética se concentran en programas que no tienen relación directa con estos temas, como infraestructura ferroviaria o proyectos militares, mientras que áreas estratégicas como conservación, manejo forestal y acuacultura sustentable permanecen con recursos limitados.
En paralelo, la Red Nacional de Refugios denunció la eliminación del Programa de Apoyo para Refugios Especializados para Mujeres Víctimas de Violencia, al ser absorbido por un programa más amplio sobre violencias feminicidas. Aunque el monto global asignado asciende a más de 856 millones de pesos, la organización señaló que no hay un desglose que garantice recursos específicos para los refugios, lo que pone en riesgo la continuidad de estos espacios.
Ramírez Cuéllar aseguró que el déficit contemplado del 4.1 por ciento mantiene la estabilidad fiscal y aleja riesgos de inestabilidad económica. Sin embargo, los cuestionamientos sobre las prioridades del gasto reflejan el debate en torno al primer presupuesto diseñado íntegramente por la administración de Sheinbaum: un proyecto que impulsa la obra pública, pero que genera dudas en materia ambiental y de atención a víctimas de violencia de género.