* Su madre, Guadalupe Neri Martínez, asegura que el caso está relacionado con un conflicto por la separación de bienes con su expareja, el pastor Rubén Hernández, y señala que el dinero fue “sembrado”.
Redacción / Alfaro Noticias
Karen Alvarado Neri y su pareja, Eduardo “N”, fueron detenidos el pasado sábado por la Policía Estatal, acusados del presunto robo de 11 millones de pesos en una vivienda de Tuxtla Gutiérrez. La denuncia fue interpuesta en diciembre por la madre de Rubén Hernández, expareja de Alvarado y líder de una iglesia cristiana en la capital chiapaneca.
Guadalupe Neri Martínez, madre de la detenida, afirmó en conferencia de prensa que su hija es inocente y que la acusación responde a una disputa personal con su expareja. Según su testimonio, Alvarado Neri terminó su relación en septiembre de 2024 y desde entonces enfrenta un proceso legal por la separación de bienes.
La familia de la detenida sostiene que el dinero encontrado en la vivienda fue “sembrado” y que la investigación ha presentado inconsistencias. También cuestionaron el origen de los recursos y pidieron que las autoridades fiscales revisen la situación financiera del denunciante.
Además, Guadalupe Neri Martínez aseguró que su hija fue víctima de violencia de género durante más de 14 años y que su expareja ejercía un control sobre ella, limitando incluso su contacto con su familia. “Muchas personas fueron testigos de la forma en que la trataba”, señaló.
La defensa de Alvarado Neri ha solicitado que se investigue el caso con imparcialidad y que se revisen las pruebas presentadas en su contra. Hasta el momento, la Fiscalía General del Estado no ha emitido una declaración sobre las denuncias de la familia.
Mientras tanto, la madre de la detenida afirmó que su hija se encuentra serena y confiada en que se esclarezca su situación. “Lo único que pedimos es justicia y un proceso transparente”, concluyó.
