* Claudia Sheinbaum respondió descartando la restitución de las pensiones y sugirió, con ironía, que Salinas podría optar por la Pensión del Bienestar, aunque esta está reservada para quienes residen en México.
El expresidente Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) reapareció en el podcast La Invención de América del Norte, donde se refirió a su situación actual como “desempleado”. En la entrevista, organizada en colaboración con la revista Nexos, el exmandatario destacó que la eliminación de las pensiones presidenciales, implementada en 2018 por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, lo dejó sin este ingreso. Salinas aseguró que ahora se dedica a la investigación histórica y a la reflexión sobre los principales temas políticos y económicos de su tiempo.
Durante la conversación, Salinas abordó también su legado como impulsor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Reconoció las críticas y preocupaciones que enfrentó su administración al vincular al país con mercados internacionales, pero defendió el acuerdo como un avance fundamental para México. Asimismo, destacó que tras dejar la presidencia ha optado por una vida discreta, residiendo en el Reino Unido y manteniendo vínculos ocasionales con España, país del que obtuvo la nacionalidad en 2021 por ascendencia sefardí.
La presidenta Claudia Sheinbaum reaccionó a las declaraciones de Salinas, descartando cualquier posibilidad de restituir las pensiones a los expresidentes. En conferencia de prensa desde Palacio Nacional, aseguró que “ningún expresidente ha solicitado la reactivación de este beneficio y, aunque lo hicieran, no se les concedería”. Sheinbaum recordó que dichas pensiones ascendían a 5 millones de pesos mensuales, además de incluir otros beneficios como seguridad y apoyo para equipos administrativos.
En tono irónico, la mandataria sugirió que Salinas podría acceder a la Pensión del Bienestar, un programa dirigido a adultos mayores de 65 años. Sin embargo, aclaró que este apoyo está reservado para quienes residen en territorio mexicano. “Es una opción válida para cualquier expresidente que viva en México, pero no lo hacemos extensivo a quienes están en el extranjero”, señaló Sheinbaum entre risas.
La eliminación de las pensiones presidenciales fue una de las primeras medidas de austeridad adoptadas por López Obrador al asumir la presidencia en 2018. El ahora expresidente justificó la decisión argumentando que México no debía destinar recursos a mantener privilegios excesivos, calificando las pensiones como “las más altas del mundo” en comparación con otros países.
