Angie Jiménez
En la última década, ningún país del hemisferio ha experimentado un aumento tan grande como México en su tasa de homicidios.
Esto según un informe realizado por la “Organized Crime and Justice in Mexico (Crimen organizado y justicia en México)” del programa Justice in Mexico que desarrolla la Universidad de San Diego, Estados Unidos, en colaboración con las universidades Nacional Autónoma de México, de Guadalajara, Autónoma de Nuevo León y la Autónoma de Puebla.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) desde diciembre pasado, cuando empezó el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, la cantidad de homicidios es de 20.599.
A diferencia del año pasado la tasa es de 22 por cada 100.000 habitantes. El incremento es del 6% con respecto al mismo período de 2018, señala el SNSP.
En una comparación, en 2016 según un estudio realizado por el departamento de conflictos armados en siria, hubieron más de 50.000 muertos en el 2016, esto, debido al estallamiento de la guerra civil. En México, el mismo año, murieron 20.824 personas. Cabe destacar que ese año fue cuando se inicie la guerra contra el crimen organizado, encabezada por el entonces presidente Felipe Calderon –la cifra incluye víctimas de la guerra contra el narcotráfico y por violencia en general-.
En fechas recientes elementos militares detuvieron en Culiacán a Ovidio Guzman, hijo del famoso narcotraficante Joaquín Guzmán Loera “El chapo”, lo que desato una serie de enfrentamientos con integrantes de Crimen Organizado, horas más tarde Ovidio fue liberado, según en una entrevista con el presidente mexicano, la liberación fue realizada debido a un miedo latente de tener un enfrentamiento donde cientos de ciudadanos resultaran heridos, o asesinados; hay que recordar que la capital de Sinaloa figura entre las ciudades más peligrosas del territorio nacional.
Hace unos días Andrés Manuel en una entrevista de prensa dio a conocer que tuvo una conversación con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para poder realizar un plan de contingencia para el control de armas.
De acuerdo con la última estadística, el 70% de los homicidios se cometieron con armas de fuego las cuales provienen de Estados Unidos; cada día entran al territorio mexicano al menos dos mil armas de fuego provenientes de Estados Unidos, y muchas de ellas se distribuyen al resto del país desde la Ciudad de México.
Finalmente según el canciller mexicano, en los próximos días iniciará una estrategia de revisión en las ciudades fronterizas de Tijuana, Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros y Ciudad Juárez.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) reporta un incremento en el número de armas involucradas en diferentes crímenes.
La tendencia se nota en el uso de rifles automáticos, con un incremento de 63% en comparación con el año pasado, así como armas de asalto con un aumento de 120%.
