- Es el encargado de abrir paso y proteger a las chuntás, asegurando el orden durante el recorrido y el baile.
Noé Juan Farrera Garzón
En la Fiesta Grande de Enero de Chiapa de Corzo, Chiapas, cada personaje tiene un papel único y significativo. Entre ellos destaca el abrecampo, quien es el encargado de abrir paso y proteger a las chuntás, asegurando el orden durante el recorrido y el baile.
La figura del abrecampo está profundamente ligada a la leyenda de María de Angulo, la noble española que, según la tradición, llegó a Chiapa de Corzo buscando una cura para su hijo enfermo. En agradecimiento por su recuperación, María de Angulo ofreció alimentos y ayuda a los chiapacorceños. En esos momentos de gran congregación, el abrecampo cumplía la función de mantener la multitud organizada, garantizando que todos pudieran recibir las bondades de esta noble mujer.
El abrecampo se caracteriza por su apariencia única y llamativa. Su vestimenta consiste en un pantalón corto, mientras que su cuerpo está pintado completamente de negro, lo que le da un aspecto enigmático. Porta una escoba, con la que recorre las calles del Pueblo Mágico de Chiapa de Corzo, ahuyentando a quienes se acercan demasiado a las chuntás y anunciando que el recorrido está en marcha.
Este personaje no solo es un símbolo de orden, sino también un recordatorio de las raíces y tradiciones que forman parte del patrimonio cultural de Chiapa de Corzo. Su presencia en la fiesta es una muestra del colorido, la historia y la espiritualidad que hacen única esta celebración.
La Fiesta Grande de Enero, declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, es un evento que combina devoción, folclore y comunidad, donde cada personaje, como el abrecampo, contribuye a mantener viva una tradición que conecta el pasado con el presente de Chiapas.