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Después de tus padres, tus maestros / Índice

Después de tus padres, tus maestros / Índice
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+ ¿Quiénes fueron tus maestros en la vida?…

+ Recuérdalos y menciónalos en reconocimiento…

+ ¿Sabes quién te enseñó a leer y escribir?…

+ ¿En qué escuelas estudiaste?…

+ Hagamos un ejercicio mental e histórico…

 

                               Ruperto Portela Alvarado.

 

         Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Viernes 17 de Abril de 2020.- En la vida, los seres humanos debemos profesar sentimientos gratos y de agradecimientos por lo que nos ha dado Dios o lo que hemos conseguido con la gracias de nuestros padres, familiares, amigos y quienes nos han rodeado en el curso de la personal existencia.

Sé que en primer lugar están nuestros padres, a quien, como yo –a mis papás Celedonio Portela Sánchez y Gregoria Alvarado Valerio— los guardo en un lugar especial en mi corazón, mis pensamientos y recuerdos; pero siempre hay alguien más a quien agradecerle como en mi caso a mi hermano Cecilio “Chilo Portela Alvarado y por supuesto que también a los demás hermanos: Daniel, Aída Luz, Mario, Gabriel, David, María Vicenta y Matías.

Le reitero mi respeto y agradecimiento a mi compadre Ignacio Luis Ramón Zamorano, “Nacho El Avión”, quien, cuando más lo necesité estuvo presente para apoyarme, de manera incondicional. Y puedo seguir con la gran listas de gentes que estuvieron a mi lado en el momento preciso como mi primo Fallo Noguerola y otros amigos de la juventud y ahora en estos tiempos. Debo agradecer también la amistad de muchos amigos que pronto los habré de mencionar.

Pero mi intención esta vez es hacer un recorrido por el pretérito de cada uno de quienes leen mis artículos con respecto a recordar nuestro paso por la primaria, secundaria, bachillerato y quizá de la universidad, para saber de esos grandes maestros que nos dieron su tiempo y conocimiento que “algunos no supimos aprovechar”.  Por ejemplo, yo siempre he enaltecido a la maestra Ángela  Carmona Rojas, por haberme enseñado a leer y escribir mis primeras palabras. A ella le dediqué mi tesis con la que me titulé de Licenciado en Periodismo en la Universidad Veracruzana, Generación 1971-75.

Tuve tres maestras en primer año de primaria en la Escuela “Benito Juárez”, en el mero centro de Alvarado, Veracruz. La primera fue la maestra Catalina Lozano, una mujer enérgica y dedicada a la educación al igual que la maestra Melby Marquez que también me dio clases en segundo y cuarto grado. A ellas también mi agradecimiento como mi recuerdo a la maestra Gladis Ochoa.

En tercer año fue la maestra Matilde Carmona Ochoa, que nos metió a la disciplina y el estudio; en quinto año tuvimos al profesor Rafael Hernández Lara, de quien tengo muy buenos recuerdos por su capacidad académica y su arte pedagógico. En sexto, fue el “Profesor Yito” Rafael Delfín Almeida, quien sabía que “los viajes ilustran” y nos llevó por todos los lugares donde pudo, bajo patrocinios que nunca supe de dónde los conseguía, como en los que yo participé a la Ciudad de México y el Centro Experimental Agropecuario de Cotaxtla, Veracruz.

Recuerdo que al subir las gradas para la entrada a la “Escuela Benito” donde había una enorme y vieja puerta de madera con cerradura y herrería de fierro forjado, a la derecha estaban los grupos de varones de la escuela “Benito Juárez” y a la izquierda los grados del primero a cuarto año de mujeres de la “Josefa Ortiz de Domínguez”. Al fondo, el quinto y sexto, donde integrábamos los grupos hombre y mujeres. En medio del patio había una fuente con su asta bandera y al fondo el escenario con un árbol de “cabeza de mono” detrás. No me he de olvidar del bebedero –junto a los baños de varones—de donde tomábamos agua a chorros y directo del tubo, sin que nos pasara nada.

Para eso he de recordar o ya me lo habían mencionado con antelación mi hermana Aída Luz Portela Alvarado, los nombres de destacados maestros de la “Josefa Ortiz de Domínguez” como las profesoras: Juana Hernández, Dolores “Lola” Norberto, mi tía Rosario Valerio y el eterno director de la escuela, don Ernesto Macaty Torres. Quizá hasta me atrevería a describir los corredores del edificio que albergaba estas dos escuelas “hermanas” donde se hacían honores a la Bandera, se desfilaba con la marcha de Zacatecas y se cantaba el Himno Nacional a la entrada de clases y después del recreo en que se bajaba el Lábaro Patrio.

Este ejercicio ya lo hice una vez en reconocimiento a mis maestros –de primaria principalmente— y varios compañeros me mencionaron algunos de sus profesores de la Secundaria y Preparatoria de Alvarado, la benemérita ESBA. De ahí recuerdo a la profesora de Español, Rafaela Quirazco; Julio Hernández Ríos de Literatura; Manuel Silva Cerecedo, de Matemáticas; Amando Díaz Román, Inglés; Agustín García Zamudio “Tinche”, Biología, en la Secundaria.

Cuando publiqué el primer artículo de mis maestros, el amigo y paisano Rolando Chávez Zamudio me recordó algunos otros maestros de la ESBA: Luis Juan Hermida, de Geografía; Héctor Delfín, Civismo; Rodolfo Zamudio “Fito Gaona”, Educación Musical y “El Mayor” que nos daba Educación Física. Me acordé entonces del “Arquitecto Delfín” que nos daba Historia del Arte; “Chico Julio” Julio Carmona Rojas, a quien también le decíamos “El Pulpo Remes” que nos impartía la cátedra de Química.

En Bachillerato: Arturo López “El Tanga”, Etimología Griega; Rodolfo Zamorano Vorrath, Literatura; Rodolfo Mora Reséndiz, Historia Universal; Manuel Hérbeles Fernández y José Luis Zamudio Alavez, Trigonometría, entre otros. Ya en la Universidad Veracruzana, en la Facultad de Periodismo donde estudié la licenciatura tuvimos a destacados maestros que bien merecen nuestro reconocimiento.

Empezaré por mis grandes maestros de la Facultad de Periodismo de la Universidad Veracruzana: Alfonso Valencia Ríos, Francisco Gutiérrez González, Enrique Segarra Tomas, Avelino Muñiz García, Alberto Juárez Rodríguez, Dámaso Nájera Sánchez, Ignacio Oropeza López, Ramiro Guzmán Tesillos, Romeo Figueroa Bermúdez, Nadia Argáiz Cabrales, Sofía E. de Esponda, José Luis Bolado Gómez, entre otros a los que habré de honrar con su recuerdo posteriormente en un artículo en el que hablaré de cada uno de ellos. No, no es que recuerde bien sus nombres, pero sí tengo todavía las constancias de boletas de calificaciones que antes nos entregaban por examen de las materias que íbamos cursando, firmadas por el maestro de la asignatura.

Pues bien, este es un ejercicio para que cada uno de mis lectores recuerde, comente y mencione quienes fueron sus maestros en cada uno de los niveles de educación, primaria, secundaria, preparatoria, bachillerato, inclusive universitario y posgrado. Vale la pena hacerles el homenaje de recordarlos y agradecerles lo que cada uno aportó a nuestra preparación profesional y los conocimientos que hoy tenemos. RP@…

 

Con un saludo desde la Ciudad del Caos, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, la tierra del pozol, el nucú, la papausa y la chincuya.

Para contactarme: rupertoportela@gmail.com  

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