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Chiapas, la gran estafa del siglo XXI / Índice

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        + Corrupción en Salud, Educación y el Campo…

        +  Y los responsables gozando de lo robado…

 

                               Ruperto Portela Alvarado.

 

                        ¿RUTILIO REPETIRÁ LA FÓRMULA?…

         Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Jueves 21 de Febrero de 2019.- Hace muchos años, en la década de los 70s, se dio en Tuxtla Gutiérrez un robo anunciado, como los que hemos visto en los últimos sexenios de este Siglo XXI. Fueron unos centroamericanos los que vinieron a esta capital para cometer su fechoría. Para eso, alquilaron un edificio junto al entonces Banco Nacional de México (BANAMEX) que se localizaba en la primera sur, esquina primera poniente.

         Ahí, presumiblemente iban a poner un negocio de venta de zapatos que hasta el nombre colocaron en un espectacular y al que denominaron “El Gran Golpe”. Para eso trabajaron varios meses sacando tierra por las noches y construir el túnel que llevaría precisamente a la bóveda del banco. Un día antes anunciaron: ¡mañana, el gran golpe! Y ¡zas!, cumplieron su objetivo de llevarse el botín, sin que hasta hoy los atrapen.

         Igual han sido los anuncios de robo y succión de presupuesto por gobiernos emanados del PRI, del PAN, PRD y recientemente del Verde Ecologista. Los otros partidos no, porque no les han dado oportunidad de robar… perdón, de gobernar. Así mismo, las principales fuentes de corrupción y despojo de patrimonio estatal y municipal han sido al sector salud, educación y el campo.

         La historia más reciente es la de los tres últimos gobiernos estatales de este Siglo XXI, empezando con PABLO ABNER SALAZAR MENDIGUCHÍA –a la par de su Secretario de Salud, ANGEL RENÉ ESTRADA ARÉVALO– a quien se le acusó de desviar el recurso destinado a medicinas, especialmente el presupuesto para el hospital de Comitán donde murieron más de una decena de niños; el recurso del Programa de Reconstrucción de los Municipios afectados por el huracán Stan, por más de 11 mil millones de pesos y el fraude maquinado en un seguro de vida –cobrado ilegalmente dijeron—por 104 millones de pesos, que lo llevaron a la cárcel por casi 14 meses.

         Quien marcó la pauta y se voló la barda en términos de corrupción en el sector salud fue el exgobernador JUAN JOSÉ SABINES GUERRERO a través de su secretario JAMES GÓMEZ MONTES, a quien se le comprobó –sin consecuencia alguna— compras de medicinas de manera directa, sin licitación o a precios alterados hasta en 500 por ciento; con una desviación o fraude por más de 760 millones de pesos. Se cree que de ahí deviene la situación de crisis financiera en la Secretaría de Salud y los estados deprimentes de clínicas, hospitales, carencia de medicinas y equipamiento, que hasta hoy se padecen.

         Agrego, todo esto persiste a la fecha por el encubrimiento a la corrupción institucional y la impunidad a los gobernadores junto con sus titulares de la Secretaría de Salud. Desde principio de siglo con la derrota del PRI y la llegada del PAN al poder, detonó la corrupción y en cascada la aceleración de los índices de pobreza, pésima atención en hospitales, clínicas y centros de salud, incluido el inoperante “Seguro Popular”.

         Pero como cada gobernador viene con la mentalidad de superar a su antecesor, desde PABLO y JUAN, los montos económicos de corrupción se fueron incrementando y, MANUEL VELASCO COELLO no podría ser la excepción. Superó a los dos por muchas millas. Debo decir que PABLO SALAZAR tuvo la precaución de no aumentar la deuda pública, pero logró sus propósitos de “nuevo millonario” con los negocios de la obra pública en contubernio con el Presidente VICENTE FOX QUESADA y JOSEFINA VÁZQUEZ MOTA referente a los programas sociales. En ese rubro de saqueo millonario también fluyeron las participaciones federales.

         JUAN SABINES GUERRERO jugó “perfectamente bien su partido”. Atendió a los más jodidos y les repartió enseres domésticos, les ayudó con dinero para iniciar un negocio “motor de la economía” y se erigió en el gobernador popular de corazón con las madres solteras y los adultos mayores. Su fuente de financiamiento fueron cinco empréstitos que le aprobaron las LXIII y LXIV Legislatura del Congreso del Estado por más de 16 mil millones de pesos; pero además dejó deudas por otros 20 mil millones, según se le acusan mediáticamente.

         Hasta donde tengo entendido, PABLO SALAZAR no le metió mano a los recursos destinados a la educación y tampoco al campo; lo mismo se puede decir de JUAN SABINES GUERRERO; pero si es un señalamiento severo el que les hacen de que  no hayan fortalecido las acciones en el proceso educativo y los programas del campo, que dejaron en el completo abandono.

         El caso del ex gobernador constitucional y “sustituto de sí mismo”, MANUEL VELASCO COELLO es fatal y deprimente. Permitió la corrupción en todas las áreas del gobierno y de todos sus colaboradores; tanto en salud como en educación y el campo. Están muy señaladas esas tres secretarías, a las que se suma el DIF que operó su “mamá también”, LETICIA COELLO GARRIDO, con un presunto desvío de casi 2 mil millones de pesos, que no han desmentido, pero algunos mal intencionados dicen que sirvió para la construcción de la “Plaza Ámbar”.

         A JULIÁN NAZAR MORALES, “El Talibán”, que fue el primer Secretario del Campo del gobierno verde-imberbe, se le acusa de despojar a los campesinos de sus apoyos y desviar –para sus bolsillos y cuentas bancarias—una extraordinaria suma de 400 millones de pesos, que es la fecha en que no le exigen cuentas y por el contrario lo sostienen en la dirigencia estatal del PRI. En educación no fueron diferentes los saqueos, pues a RICARDO AARÓN AGUILAR GORDILLO se le señala de un faltante de 300 millones de pesos que ni ha comprobado ni le han fincado responsabilidades, como se supone debiera ser.

         Claro que tanto PABLO como JUAN tuvieron sus “affaires económicos” en la otrora Secretaría de Obras Públicas y Comunicaciones, pero el GÜERO VELASCO se pasó de la raya con sus “testaferros” y “cómplices”, BAYARDO ROBLES RIQUÉ y ALBERTO BETANCOURT ESPONDA, titulares de esa dependencia, donde se habla de sustracciones de miles de millones de pesos que se deben investigar para deslindar responsabilidades y “no hablar a las tanteadas”.

         En esa dependencia se cuestiona también al primo del ex gobernador verde, JUAN PABLO ORANTES COELLO quien junto con JUAN PABLO MONTES DE OCA AVENDAÑO –actual diputado local—se destacaron por sus rapacerías que presuntamente suman cientos de millones de pesos. Lo mismo se supone que hicieron los “hombres de confianza del GÜERO”, JORGE BETANCOURT y EDUARDO FRANCISCO ZENTENO NÚÑEZ en la dirección general del Instituto de Infraestructura Física Educativa (INIFECH), quienes presuntamente se hincharon de paga con la complacencia del entonces gobernador MANUEL VELASCO COELLO.

         Quedan para la historia los hechos de corrupción en la Secretaría de Salud donde estuvieron inmersos los diversos titulares de la dependencia, como CARLOS EUGENIO RUIZ HERNÁNDEZ, a quien “por sus buenos servicios” le premiaron con la Rectoría de la UNACH, lo quisieron reelegir y al no poder lo nombraron “asesor” del gobierno de RUTILIO ESCANDÓN. Lo acusan también de ser parte de la “Estafa Maestra” en contubernio con la Secretaria de SEDESOL y SEDATU, ROSARIO ROBLES BERLANGA.

         El otro que se fue hasta el fondo y siempre estuvo cuestionado es FRANCISCO ORTEGA FARRERA, “el héroe del Seguro Popular”, premiado con la Secretaría de Salud para cargarle todos los muertos de la corrupción de su “jefe” MANUEL VELASCO COELLO. Yo no sé si ORTEGA FARRERA actuó por iniciativa propia, pero se fue con la inercia que le había dejado su antecesor RUIZ HERNÁNDEZ y los Secretarios de Salud del gobierno de JUAN SABINES, que fueron nefastos y sensacionales para las trácalas. Finalmente la dejaron los restos de la Secretaría de Salud a la doctora LETICIA GUADALUPE MONTOYA LIÉVANO, quien puede ser que “pague los platos rotos”.

         Los indicios de corrupción en exceso del gobierno de SABINES GUERRERO y VELASCO COELLO ya se sabían y ni dudas cabían en sus acusaciones. Hoy todo se vuelca por el descubrimiento de una bodega repleta de medicinas compradas desde el 2016 para curar el dengue, que se escondieron para volver a comprarlas a sí mismos, cometiendo un crimen contra los chiapanecos que más necesitados están de los servicios públicos de salud.

         Y si el gobernador de la “4T”, RUTILIO CRUZ ESCANDÓN CADENAS necesitaba pruebas de esos actos de corrupción que bien conoce –por haber sido parte del gobierno verde-imberbe—ya las tiene, por lo que ahora está obligado a actuar en consecuencia  y someter a los implicados en el marco de la ley. Entiendo que le es muy difícil al gobernador llevar ante la justicia a los que fueron sus superiores jerárquicos  y compañeros en el ejercicio del poder, pero, “la ley es la ley”, por encima de quien sea.

         El otro extremo sería que RUTILIO ESCANDÓN CADENAS traiga la visión de que su gobierno sea mejor y supere lo hecho por los de PABLO, JUAN y MANUEL, esos de nombres bíblicos que condujeron a Chiapas al desastre económico, político y social en aras de convertirse en los nuevos millonarios en solo un sexenio, cada uno. Seremos testigos de esta nueva historia.  Y como dijo el ciego: ahí lo ves…

Se acabó el mecate… Y ES TODO…

Para comentarios, quejas y mentadas: rupertoportela@gmail.com

Celular: 961 18 8 99 45.

MIEMBRO DE LA ASOCIACIÓN DE COLUMNISTAS CHIAPANECOS. A. C. 

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