
* Las investigaciones señalan que los agentes habrían entregado a personas retenidas en el predio, identificado como un posible centro de adiestramiento y exterminio.
Tres ex policías municipales de Tala, Jalisco, fueron detenidos por su presunta participación en desapariciones forzadas y colaboración con un grupo criminal que operaba en el rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán. Las detenciones forman parte de una investigación sobre el uso del predio como centro de adiestramiento para sicarios y su posible vínculo con múltiples desapariciones.
Uno de los detenidos, José Antonio “N”, fue capturado en Colima por el delito de portación de cartuchos. Sin embargo, durante su revisión de antecedentes, las autoridades descubrieron que tenía una orden de aprehensión vigente por su presunta participación en los hechos del rancho Izaguirre. Tras su arresto, fue trasladado a Guadalajara y posteriormente enviado a la Ciudad de México bajo custodia federal.
Otro de los ex policías, Gabriel “J”, fue detenido en el municipio de Acatic mediante una orden judicial. La Vicefiscalía en Personas Desaparecidas lo señala por su presunta implicación en la privación de la libertad de un hombre, quien fue retenido en el rancho y posteriormente liberado. Según las investigaciones, Gabriel “J” y otros agentes municipales habrían interceptado a la víctima con el pretexto de realizar una revisión para después entregarla a un grupo de civiles.
El tercer detenido ya había sido arrestado el año pasado, cuando las autoridades descubrieron el rancho Izaguirre y detuvieron a otras diez personas, presuntamente integrantes del “comando Lastra”, liderado por José Gregorio Lastra Hermida, quien habría reclutado y entrenado sicarios en el predio.
Colectivos de búsqueda han identificado el rancho Izaguirre como un posible sitio relacionado con desapariciones. En el lugar se ha colocado un memorial con flores, veladoras y una bandera en honor a las víctimas. Las autoridades han señalado que el predio sigue siendo objeto de investigación debido a su posible uso como centro de exterminio. Las detenciones de los ex policías representan un avance en la investigación, pero las autoridades continúan recopilando pruebas para esclarecer los hechos y determinar si hay más implicados.