Sr. López
Tía Lucas (Lucrecia pero así le decíamos a sus espaldas), era una lengua muy temida en todo Toluca: deshacía el prestigio de cualquiera, soltando chismes de ¡y retiemble en sus centros!, por más falsos que fueran. Pero estaba tía Victoria, esa que tuvo más colchones que la cadena Sheraton, que sabía intimidades de todo mundo, que nunca abría el pico sino para pararle el alto a alguien y muy acreditada porque nunca mentía. Y eso le pasó a tía Lucas la vez que empezó a calumniar a una sobrina muy querida por tía Victoria, que la atajó: -Tú dices algo de Alicita y yo cuento que tu marido es capón… y quién te hizo los hijos -casi se desmaya; se le volvió a ver muy rara vez. ¡Viva tía Victoria!
Ayer fue un día pesadito en Palacio Nacional y en las oficinas de más de cuatro gargantones nacionales: Ovidio Guzmán López -“El Ratón”-, hijo del Chapo Guzmán, se declarará culpable el 9 de julio próximo,de algunos de los delitos por narcotráfico de que está acusado.
Lo informó ayer en la tarde, la Corte Federal de Distrito Norte de Chicago, al ser notificada por los fiscales del Departamento de Justicia de los EEUU, que habíanalcanzado un acuerdo de cooperación con Ovidio. La jueza del caso es Sharon Johnson, nominada al cargo por el entonces presidente Barack Obama, quienaseguró que era “la mejor y más brillante jueza de toda la nación”. Según el sapo es la pedrada.
Los términos precisos del acuerdo de cooperación de Ovidio con los fiscales de EEUU, no se conocen aún (y lo normal es que jamás se hagan públicos en su totalidad), pero sí se entregará -completito-, a la Jueza. Queda implícito que conforme acostumbran allá y los antecedentes de este tipo, los fiscales aceptan estos convenios si y solo si, reciben del acusadoinformación suficiente para formular nuevos casos criminales a personas de igual y mayor importancia (los pelados bota punta pa’rriba no les interesan), en especial sobre quienes residan en el extranjero (eso les encanta).
En el asunto de este hijo del Chapo, los fiscales han sido muy firmes en obtener información sobre las relaciones de corrupción del Cártel de Sinaloa con gobernantes y políticos de México, policías, militares y empresarios cómplices. Salvo la señora de las quesadillas, todos les interesan, mucho (y nada tiene que ver el fétido Trump en esto, así son allá, siempre).
Y lo mismo están negociando con el otro hijo del Chapo que tienen preso, Joaquín, el que el 25 de julio del 2024, les llevó a Ismael el “Mayo” Zambada, el capo principal del cártel de Sinaloa. Esto lo anticipó desde el año pasado, Jeffrey Lichtman, abogado de los dos hermanitos. Y falta que salga con otro convenio el “Mayo”. El acabose.
No faltará quien piense que es muy feo ser rajón, chismoso y convenenciero, pero los jóvenes enfrentaban cadena perpetua si se ponían necios enseguir el juicio alegando inocencia. En cambio, así, les van a recetar de 5 a 7 años de cárcel… y ¡a casita!
Ya luego, si este acuerdo sale bien, los otros dos hermanos Guzmán, Iván Archivaldo y Jesús Alfredo, decidirán si le entran al baile, se entregan y arreglan de una buena vez sus cosas.
El problema de estos asuntos es que allá en territorio del tío Sam, los jueces dan por buenas las declaraciones de los soplones, no tanto porque sean muy convincentes, sino porque sus fiscales y agencias de seguridad, las investigan antes para verificar su validez. Y créalo, no son fáciles de convencer, allá sí les da escrúpulo enchiquerar inocentes, aunque lo hacen, pero no a sabiendas.
Se preguntará alguien del todo ajeno a las cosas del albañal, si esto de andar echando de cabeza a otros es costumbre de los delincuentes. No. Lo que sucede es que ya en una celda yanqui no hay poder humano que salve al criminal y la oferta es irresistible: tus cómplices de saco y corbata, tan frescos mientras tú te pudres aquí. Ayúdate y te ayudamos. Y se ayudan, cómo que no.
En Palacio Nacional esto preocupa no porque la Presidenta ande en esas danzas, que uno sepa, sino porque es muy sabido que el tío Sam le anda oliendo las faltriqueras a algunos muy pero muy importantes políticos de los de ahora.
Ya era para preocupar, mucho, que los EEUU haya procedido contra algunos implicados en el huachicol fiscal, que daña nuestro erario, no el de ellos, pero, igual, es un delito que implica acciones ilegales en su territorio y se meten, con furia. Y ese contrabando de combustibles, según los investigadores yanquis implica a ¡Morena! Sume a eso las peculiares, raras muertes de dos que estaban señalados de ser cabezas de ese negocito que del 2019 al 2024, significó pérdidas fiscales por más 554 mil millones de pesos. Chulada.
Agreguemos a esta ensalada esperpéntica, el serio error que cometió Morena el 2 de mayo pasado, al firmar un convenio con el Partido Comunista de Cuba, como informó en X, Carolina Rangel Gracida, secretaria General del Comité Ejecutivo Nacional de Morena:
“La cooperación, aprendizaje e intercambio es fundamental. Tuve el honor de encabezar la firma de convenio entre el @PartidoMorenaMx y @PartidoPCC, en el marco de ello conversar con el Presidente @DiazCanelB a quien le refrendamos el cariño y solidaridad del pueblo de México”.
¿Cooperación, aprendizaje, intercambio, cariño ysolidaridad con ese régimen dictatorial y asesino, con ese Díaz Canel?… ¿de veras?… la huida política definiéndose como rival ideológico de los EEUU, para así evadir cualquier acusación a personajes relevantes de Morena e incluso contra el Señor de los Abrazos, no pasa desapercibida al tío Sam. Y por cierto: jamás aceptará un México definido (ya firmado), como pro-comunista.
Mal consejero en política es el triunfalismo. Si en Palacio y en Morena ven que pasa el tiempo y nada pasa y que su líder y fundador, se va saliendo con la suya, que tomen en cuenta que la Casa Blanca no va a gastar su mejor bala antes de tiempo; ya en su momento apretarán, en el quinto año de este sexenio… y a ver si le aguantan la boquita al tío Sam. ¡Ah!, es bala de plata.