* Por su parte, extrabajadores de la planta de moscas estériles exigieron sus pensiones y advirtieron que no permitirán su reapertura sin ser incluidos, al considerarse clave para enfrentar la emergencia sanitaria.
Redacción / Alfaro Noticias
Autoridades de salud confirmaron dos nuevos casos humanos de miasis causada por el gusano barrenador del ganado, con lo que suman cuatro los contagios registrados en el estado. Los pacientes son adultos del ejido Altamira 2, en el municipio de Mapastepec; uno de ellos permanece hospitalizado en el IMSS Bienestar y el otro fue trasladado a Ciudad Salud, en Tapachula.
Los casos anteriores se reportaron en los municipios de Acacoyagua y Tuzantán. En este último, un hombre de 50 años fue mordido por un perro y días después notó la aparición de larvas en la herida. Fue atendido primero en Huixtla, donde se le extrajeron seis larvas, y luego trasladado a Tapachula por complicaciones. La primera persona contagiada fue una mujer de 77 años, quien fue dada de alta tras recibir tratamiento.
La regidora Frida Viridiana Coutiño Jiménez emitió una alerta preventiva y llamó a la población a no ignorar los síntomas. Advirtió que el brote podría extenderse si no se actúa con rapidez, ya que la plaga afecta tanto a personas como a animales.
En el sector ganadero, autoridades municipales informaron que se han detectado al menos cien casos de infestación por gusano barrenador en animales como caballos, ovejas, cabras, gallinas y perros, principalmente en comunidades rurales. Según el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), Chiapas concentra el 60 por ciento de los más de mil 500 casos reportados a nivel nacional en animales.
Ante la emergencia, extrabajadores de la planta de producción de moscas estériles en Tuxtla Gutiérrez ofrecieron su experiencia técnica para apoyar en el combate a la plaga. En una rueda de prensa, advirtieron que en Chiapas “no hay personal con la capacidad para manejar adecuadamente el gusano barrenador” y exigieron el pago de pensiones pendientes desde el cierre de la planta hace más de 40 años. Afirmaron que, sin su participación, no permitirán una eventual reapertura.
El gusano barrenador es una plaga que deposita sus larvas en heridas abiertas, donde se alimentan de tejido vivo, provocando lesiones severas, infecciones e incluso la muerte si no se trata a tiempo. Las autoridades han comenzado a liberar moscas estériles en Tapachula para crear una barrera biológica, como se hizo en 1985, cuando la región enfrentó una situación similar.