* El presidente López Obrador confirmó el abuso de autoridad, anunció la detención de los policías implicados y la intervención de la FGR.
En un giro del caso de Ayotzinapa, el abogado Vidulfo Rosales reveló graves acusaciones de tortura contra Osiel, un normalista detenido. Según Rosales, la policía de Guerrero habría coaccionado a Osiel para que se declarara culpable de portación de armas y disparar, incluso afirmando que los agentes ‘sembraron’ un arma en la escena de los hechos. Este testimonio pone de manifiesto la brutalidad sufrida por los estudiantes.
La detención, que involucra a tres estudiantes en una camioneta: Yanqui Kothan, Osiel y ‘Arenita’, fue marcada por coacción y maltrato físico, según el abogado. Rosales destacó irregularidades tanto en la detención como en las declaraciones oficiales sobre el incidente, subrayando la falta de congruencia entre las versiones de las autoridades y los hallazgos en el lugar de los hechos.
El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó la existencia de abuso de autoridad en el caso y niega vínculos con el incidente de Ayotzinapa. Además, aseguró que Osiel no disparó un arma de fuego, respaldando las afirmaciones de tortura. López Obrador anunció que los policías involucrados en el caso están detenidos en Guerrero y que la Fiscalía General de la República (FGR) se hará cargo de la investigación.
La situación adquiere mayor relevancia en el contexto de la tensión previa al décimo aniversario de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. El abogado Rosales destacó la necesidad de que la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” lleve la denuncia, mientras el presidente anticipa una reunión directa con los padres en abril, sin la intervención de organizaciones de derechos humanos ni abogados. La FGR asumiendo la investigación indica un paso hacia la transparencia en un caso que ha marcado la lucha por la justicia en México.
En otro frente, estudiantes de la Normal “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa rindieron homenaje a Yanqui Kothan Gómez Peralta, asesinado por policías estatales. Este caso del 7 de marzo se suma a la tensión creciente entre el Gobierno de López Obrador y los normalistas, a tan solo meses del décimo aniversario de la desaparición forzada de los 43 estudiantes. La muerte de Yanqui Kothan se ha convertido en un símbolo de la violencia y la lucha continua por los derechos humanos en México.