* El expresidente señaló que Morena ha copiado lo peor del PRI, mientras que la mandataria defendió que hay libertades y voto popular en los tres poderes
El expresidente Ernesto Zedillo y la presidenta Claudia Sheinbaum reavivaron este lunes su confrontación pública luego de que el exmandatario asegurara que en México se ha deteriorado la democracia y el Estado de derecho.
En entrevista con el diario español El Mundo, Zedillo afirmó que el actual gobierno “ha copiado lo peor del PRI” y que “la corrupción guía su funcionamiento”. Atribuyó el deterioro institucional al expresidente Andrés Manuel López Obrador y a la actual administración, que a su juicio buscan consolidar un partido hegemónico. “Morena, en su intento de construir un partido dominante, ha terminado con la democracia mexicana”, declaró.
El exmandatario también criticó la reciente reforma constitucional que establece la elección por voto popular de jueces, ministros y magistrados, al considerar que contribuye a “la destrucción del Poder Judicial”. Sostuvo que este cambio “matará las condiciones de competencia equilibrada” y comparó la situación con la de regímenes autocráticos como el de Venezuela.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum respondió sin que mediara pregunta y rechazó los señalamientos. “México está en el mejor momento de su democracia y libertad. Es uno de los países más democráticos del mundo”, afirmó.
La mandataria defendió que en el país se elige por voto popular a los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, y que la democracia también se refleja en las libertades de expresión y de reunión. “Nunca antes había existido tanta libertad. Digan lo que digan, hay plena libertad para hablar de la presidenta o de los expresidentes”, subrayó.
Sheinbaum recordó que Morena ganó con el 60 por ciento de los votos en 2024 y cuestionó que figuras como Zedillo y Felipe Calderón hablen de falta de democracia cuando, dijo, sus propios gobiernos estuvieron marcados por fraudes electorales y crisis económicas.
Al referirse al pasado político del exmandatario, la presidenta evocó la crisis financiera de 1994 y el rescate bancario del Fobaproa. “Fue una deuda privada que se hizo pública y seguimos pagando hasta hoy”, señaló.
La mandataria insistió en que su gobierno representa una ruptura con los privilegios y la corrupción del pasado. “El movimiento de transformación siempre ha luchado por la democracia, las libertades y el bienestar del pueblo. Eso no va a cambiar”, concluyó.