* Tras nueve meses sin respuesta, integrantes del SITRAM protestaron frente a la Unidad Administrativa Municipal.
Redacción / Alfaro Noticias
Más de 300 trabajadores sindicalizados del Ayuntamiento de San Cristóbal de Las Casas se manifestaron el día martes para exigir atención inmediata a una serie de demandas laborales que, aseguran, han sido ignoradas por la administración municipal durante los últimos nueve meses. La protesta fue encabezada por el Sindicato Independiente de Trabajadores del Municipio (SITRAM), que denunció hostigamiento constante, despidos arbitrarios y omisión en el cumplimiento de derechos adquiridos.
Los inconformes partieron desde la zona sur de la ciudad y se concentraron frente a la Unidad Administrativa Municipal, donde hicieron un llamado directo a la presidenta municipal, Fabiola Ricci, para que los reciba y escuche sus reclamos. Con pancartas, exigieron respeto a los derechos laborales de quienes tienen hasta dos décadas de servicio, y denunciaron prácticas de violencia institucional, en particular hacia las mujeres trabajadoras.
Entre las principales exigencias está el reconocimiento pleno de empleados reinstalados por la vía legal, el otorgamiento de pensiones a quienes ya cumplieron con los años de servicio, la devolución de retenciones salariales aplicadas desde octubre de 2024 y la dotación urgente de uniformes y medicamentos. También solicitaron la contratación de médicos especialistas y mejoras en la atención médica para el personal.
“El ayuntamiento ha ignorado nuestros oficios, hemos buscado el diálogo por meses y no hemos recibido respuesta”, declaró Elvia de Jesús Vázquez Herrera, secretaria general del sindicato. La dirigenta denunció además que hay casos de discriminación política al interior de las oficinas municipales, así como violencia de género ejercida por superiores jerárquicos.
Las y los manifestantes señalaron que la situación ha provocado incertidumbre laboral entre el personal de base, al tiempo que acusaron al gobierno municipal de intervenir en los asuntos internos del sindicato mediante dádivas y presiones. También exigieron frenar la llamada “estabilización sindical” que, según dijeron, debilita la autonomía de su organización.
“Queremos que se nos escuche y se atiendan nuestras demandas con seriedad. No estamos aquí por capricho, sino por necesidad. Lo que pedimos es legal y justo”, concluyó uno de los voceros.
