* Fernando Morales, padre de la joven, expresó su dolor por el manejo del caso y criticó la falta de apoyo de las autoridades en su búsqueda.
El cuerpo de Lorena Jacqueline Morales Valencia, joven de 28 años reportada como desaparecida desde el pasado 22 de mayo, fue identificado oficialmente por sus familiares tras un proceso de pruebas genéticas. Su padre, Fernando Morales, confirmó que el hallazgo ocurrió en una zona despoblada del municipio de San Felipe, Guanajuato.
La Fiscalía General del Estado no ha emitido un comunicado oficial sobre el caso, aunque fuentes cercanas a la investigación confirmaron que la identidad de la víctima se corroboró por medio de análisis de ADN. El cuerpo fue localizado días después de su desaparición, aunque la información no había sido difundida públicamente. La familia había activado el Protocolo Alba y mantenía una intensa búsqueda desde que se perdió el rastro de la joven.
Lorena Jacqueline trabajaba en un expendio de comida preparada en León. El dueño del establecimiento, Juan Antonio “N”, fue detenido el martes 3 de junio luego de que circularan en redes sociales videos de una cámara de seguridad que lo muestran presuntamente trasladando un cuerpo envuelto en cobijas y una maleta. Las imágenes lo ubican en distintos momentos cargando los objetos sospechosos y colocándolos en la cajuela de un vehículo.
La familia de la víctima lo señala como principal sospechoso. El video, fechado el mismo día de la desaparición, muestra al hombre descendiendo de un automóvil en la Avenida Panorama con un bulto cubierto en una bolsa negra, el cual introduce a un departamento. Horas más tarde, se le observa saliendo con una maleta y el mismo bulto, que coloca en el coche con el que se retira del lugar.
Fernando Morales, padre de la joven, expresó su dolor por el manejo del caso y criticó la falta de apoyo de las autoridades y de la comunidad en los días en que buscaban a su hija. Además, pidió respeto hacia su familia y cuestionó la cobertura sensacionalista de algunos medios y el morbo que ha rodeado el caso en su colonia.
“Ya se reconoció el cuerpo con ADN. Ayer fuimos a la fiscalía, estamos esperando que nos lo entreguen. Yo soy el papá, no hay otra fuente más confiable”, declaró con evidente dolor. También pidió empatía a la prensa y a la ciudadanía: “Pónganse en nuestro lugar, no se trata solo de tener la noticia”. El caso está siendo investigado como un feminicidio.