* Denunciaron la falta de voluntad política para atender la crisis y respaldaron la postura del Comité contra la Desaparición Forzada de la ONU.
Colectivos de madres buscadoras realizaron una clausura simbólica del Senado de la República este miércoles, en protesta por las declaraciones del presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, quien ha negado que en México existan desapariciones forzadas de forma sistemática. Las manifestantes exigieron una disculpa pública y demandaron reconocimiento a la crisis que enfrenta el país.
Desde las 10 de la mañana, madres y familiares de personas desaparecidas comenzaron a llegar a las inmediaciones del recinto legislativo, donde colocaron mantas, fichas de búsqueda y sellos de clausura frente a las puertas 2 y 3. También escribieron sobre la calle la frase: “Negar y ocultar es desaparecer +127 mil”, en referencia al número de personas desaparecidas registradas por las autoridades.
Durante la manifestación, Jackie Palmeros, madre de Jael Montserrat, desaparecida en 2020, expresó su indignación por las declaraciones de Noroña. “Estamos encabronadas y lo que le sigue. Este señor tiene que salir a dar una disculpa pública. Todas son desapariciones forzadas, nadie desaparece por voluntad propia”, reclamó. También criticó la falta de voluntad política para atender a las víctimas y la simulación institucional.
La protesta también respondió a la postura del Senado, que a propuesta del propio Noroña rechazó los señalamientos del Comité contra la Desaparición Forzada de la ONU (CED) y anunció que buscaría sancionar al presidente del organismo por advertir la existencia de desapariciones forzadas en México. La presidenta Claudia Sheinbaum respaldó esta posición y afirmó que el fenómeno responde a la acción del crimen organizado, no del Estado.
Jorge Verástegui, activista del colectivo Glorieta de los Desaparecidos, acusó a los legisladores de evadir su responsabilidad. “Trajimos los rostros de nuestros desaparecidos porque se niegan a aceptar esta realidad. Apoyamos al Comité de la ONU y reiteramos la necesidad de su intervención en México”, declaró. También recordó que desde 2017 han solicitado a la Corte Penal Internacional que investigue al Estado mexicano.
Tras la movilización, personal del Senado retiró los carteles y limpió las pintas realizadas por los colectivos. A pesar de ello, las madres buscadoras advirtieron que continuarán su exigencia de verdad, justicia y reconocimiento a las desapariciones forzadas, una crisis que consideran invisibilizada desde las propias instituciones.