Retención de menores indígenas en Sonora genera preocupación; exigen revisión de protocolos
* Las edades de los menores oscilan entre uno y 12 años, y su intervención ha sido interpretada como parte de un patrón de criminalización de la movilidad indígena.
Daniela Alfaro
La reciente retención de seis menores indígenas tsotsiles en Navojoa, Sonora, ha suscitado una ola de indignación entre organizaciones civiles y defensoras de derechos humanos. Según la Red de Observación y Acompañamiento a Niñeces Indígenas en Situación de Movilidad (Roanim), el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de las Familias (DIF) local intervino bajo circunstancias engañosas, separando a los menores de su madre sin el consentimiento adecuado.
Los niños, cuyas edades oscilan entre uno y 12 años, fueron separados en tres operaciones distintas, justificando su retención con el argumento de que recibirían atención básica. Sin embargo, las organizaciones han señalado que esta táctica podría haber sido utilizada para llevarse a los menores sin la debida autorización de sus familiares.
Este incidente ha sido catalogado como parte de un patrón más amplio de criminalización de la movilidad indígena, lo que genera serias inquietudes sobre el respeto a los derechos de la infancia indígena en situaciones de movilidad. La intervención del DIF ha sido criticada por no considerar las implicaciones de sus acciones en el bienestar de los menores.
Las organizaciones defensoras de los derechos de los niños han exigido la reincorporación inmediata de los menores a sus familias y una revisión exhaustiva de los protocolos que llevaron a su separación. En este contexto, subrayan la importancia de que las autoridades actúen para restablecer la confianza en las instituciones encargadas de proteger los derechos de estas comunidades.
