* Denunciaron que las niñas y adolescentes indígenas se enfrentan a la desnutrición, embarazos adolescentes y matrimonios infantiles, exacerbados por la desigualdad y discriminación.
Redacción / Alfaro Noticias
Cientos de mujeres, adolescentes y niñas se manifestaron durante el fin de semana en San Cristóbal de Las Casas, para exigir al nuevo Gobierno de México, encabezado por Claudia Sheinbaum, el cese de la violencia y la desigualdad que afectan a sus comunidades. La protesta se lleva a cabo a pocos días del Día Internacional de la Niña, que se conmemora el 11 de octubre.
Las manifestantes se reunieron en el norte de la ciudad y marcharon hasta el parque central, portando pancartas y siluetas de cartón con mensajes como “Todos los derechos para las niñas, niños y adolescentes” y “Niñas luchando, el mundo transformando”. Magdalena Magaña, una adolescente tzotzil de 14 años, destacó ante medios nacionales que la violencia escolar, el maltrato doméstico y el matrimonio infantil son barreras que les impiden cumplir sus sueños.
En Chiapas, la violencia y los conflictos relacionados con el crimen organizado han aumentado en los últimos meses, generando una crisis en materia de derechos humanos. Según la organización Melel Xojobal, más de un millón de niñas y adolescentes viven en el estado, de las cuales 300 mil hablan alguna lengua indígena y son discriminadas por ello. Las estadísticas revelan que las niñas son víctimas del doble de delitos en comparación con los niños.
Destacaron que el problema de las desapariciones de menores en Los Altos es alarmante; en el estado desde 2020, alrededor de 2 mil niñas y adolescentes han desaparecido, siendo las de 12 a 17 años las más vulnerables. Las organizaciones que apoyan a las menores demandan atención inmediata de las autoridades para garantizar su seguridad y bienestar.
Entre los problemas críticos que enfrentan las menores, también se encuentran la desnutrición y el suicidio, que son la tercera y segunda causa de muerte, respectivamente, en niñas de cinco a 11 años y adolescentes. Además, más de 65 mil adolescentes de entre 12 y 14 años están casadas o viven en pareja, y se estima que cada mes alrededor de 250 de ellas quedan embarazadas.
Al finalizar la marcha, las participantes realizaron diversas actividades culturales y artísticas, incluyendo rap y danza, para expresar su deseo de un futuro sin violencia. Adaptaron el canto popular “Arroz con leche” para reflejar su anhelo de vivir en un mundo donde puedan soñar y luchar por sus derechos.
“¡Arroz con leche, yo quiero encontrar a una compañera que quiera soñar, que crea en sí misma y salga a luchar por conquistar sus sueños de libertad! Valiente, no sumisa, alegre y fuerte y quiero ser yo!”, cantaron.
