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Primer día de Sheinbaum / Al Sur

Primer día de Sheinbaum / Al Sur
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Guillermo Ochoa-Montalvo

Querida Ana Karen, “Es tiempo de transformación, es tiempo de mujeres” dijo la presidenta número 66 de México, Claudia Sheinbaum Pardo, en su discurso al tomar posesión protocolaria en la Asamblea General representada por 250 diputadas y 250 diputados. ¿Será un gobierno con perspectiva de genero y reconciliación con las mujeres agraviadas durante 6 años?

Claudia recibió la banda presidencial de Ifigenia Martínez, una mujer de 95 años cuya historia como activista de la izquierda en México seguirá siendo un ejemplo para las mujeres. La banda presidencial, confeccionada por una soldada del ejército llamada Evangelina Herrera, le fue impuesta ante la presencia de los representantes de 106 países y 70 mujeres de pueblos originales quienes más tarde le entregaron el Bastón de Mando a la nueva Tlatoani de México.

“Mañana estaremos en Guerrero para atender a los 29 municipios afectados por el huracán John” Ese es el primer desafío de Sheinbaum: mojarse los pies y no lavarse las manos.

“Gobernaré para todas y todos” fue la promesa incumplida del señor López la cual, reitera la presidenta y será durante su desempeño, si logra cumplirla porque su discurso fue marcadamente de continuismo, de loas al señor López, con la salvedad de algunos temas importantes; sin embargo, no habló de reconciliación ni de los temas álgidos.

La esperanza radica en que Claudia Sheinbaum comprenda que con el control del Congreso, los gobierno estatales de Morena y el apoyo de 35 millones de mexicanos, ella puede marcar un nuevo rumbo para México. 

A su discurso esperanzador se suman 6 puntos de los 10 expresados en su discurso donde sólo rindió homenaje al expresidente en los primeros cuatro. Los seis puntos trascedente fueron. 5. Prohibido prohibir. Habrá libertad de expresión para el pueblo y periodistas; 6. El desarrollo y bienestar del pueblo sólo podrán fortalecerse con el cuidado del medio ambiente y los recursos naturales. 7. Las mujeres tenemos derecho a la igualdad sustantiva. 8. México es un país soberano, independiente, libre y democrático; queremos la paz y la fraternidad de las naciones y nos coordinamos, más no, no subordinamos. 9. La política se hace con amor, no con odio; la felicidad y la esperanza se fundan en el amor al prójimo, a la familia, a la naturaleza y a la patria; 10. Condenamos el clasismo, el racismo, el machismo y cualquier forma de discriminación; no es sólo un asunto de tolerancia, es el reconocimiento de que la profundización de las desigualdades llevará siempre a la injusticia. La fraternidad significa vernos a los ojos como iguales.

Después de sus 10 puntos, prometió que garantizará todas las libertades, la de expresión, la de prensa, la de reunión, la de movilización. “La libertad es un principio democrático, y nosotros, somos demócratas. “Se respetarán los derechos humanos y nunca usaremos la fuerza del Estado para reprimir al pueblo; respetaremos y garantizaremos la diversidad religiosa, política, social, cultural y sexual de nuestro sociedad. Cualquiera que diga que habrá autoritarismo, está mintiendo”.

Una buena señal fueron los temas del agua, las energías renovables, la extensión de los ferrocarriles, la autonomía del Banco de México; la protección a la inversión nacional y extranjera; la relocalización de las empresas en el marco de los Tratados de Libre Comercio; la promesa de no elevar los precios de la canasta básica ni las tarifas de gas y energía eléctrica; prometió conducir una política exterior de “coordinación más no, nos subordinamos”.

Habló de los programas de bienestar y su ampliación a mujeres de 60 años; de las becas a estudiantes; de las pensiones universales a discapacitados y ancianos. Habló de programas alimentarios prometiendo 2 despensas básicas; pero omitió decir cómo lo financiará al recibir un país con un déficit fiscal muy elevado así como una deuda pública disparada, la mayor en la historia nacional.

Negó que México esté militarizado. Omitió el caso de Sinaloa con sus 90 muertos en unas semanas; tampoco tocó el tema de los 12 mil desplazados en Chiapas. Habló confusamente de la Reforma Judicial prometiendo salvaguardar los derechos laborales y salariales de los trabajadores del Poder Judicial. No habló del censo rasurado de 101 mil desaparecidos ni de las 12 mujeres asesinadas al día.

Antes de Claudia Sheinbaum, hubieron varias mujeres aspirantes a la presidencia que se quedaron en el camino sin lograr el triunfo: Josefa Ortiz de Domínguez; Leona Vicario, Rosario Ibarra de Piedra en 1982 y 1988; Cecilia Soto en 1994 contendiendo con Marcela Lombardo; Patricia Mercado; Josefina Vázquez Mota en el año 2012; Margarita Zavala en el 2018 y Xóchitl Gálvez en 2024.

TRAYECTORIA.

Claudia Shinbaum Pardo nació en el seno de una familia donde se entendía bien la ideología de izquierda, y desde ahí lucharon a favor de la justicia durante el movimiento de 1968; se define como política, feminista, científica y académica. Desde joven, se involucró en la universidad en movimientos sociales a favor de los estudiantes rechazados de la UNAM; apoyó las causas a favor de las madres de hijos desaparecidos y a los presos políticos. Claudia domina el inglés. Es licenciada en física con maestría en ingeniería energética por la UNAM. Fue la primera mujer en obtener un doctorado en la facultad de ingeniería de la UNAM y obtiene un segundo doctorado en una universidad de California. Es madre de Mariana y Rodrigo Imaz. Su esposo Jesús María Tarriba Unguer, es especialista en riesgo financiero. 

En 1989 se afilia al PRD invitada por el señor López. En el año 2000 se incorpora al gobierno de AMLO como Secretaria del Medio Ambiente; en el 2012 participa en la creación del partido Morena; fungió como alcaldesa de Tlalpan por elección popular y más tarde como Jefa de Gobierno de la Ciudad de México dejando el cargo a los 4 años para iniciar su campaña política hacia la presidencia de la República.

Sheinmbaum se vio envuelta en los escándalos como enfrentar el mayor número de muertos durante la pandemia; la cancelación de estancias infantiles para entregar directamente esos apoyos a los padres de familia; así como los accidentes y la  tragedia de la Línea 12 del Metro donde murieron 29 personas al derrumbarse.

El discurso de Claudia Sheinbaum es ambiguo; por anulado, expresa su apego al continuismo del gobierno del Señor López y por otra parte, deja entrever un cambio de esperanza y reconciliación nacional. Analizando los discursos históricos de toma de posesión,  todos juran y prometen lo que al final, ninguno cumple; sin embargo, deseamos darle un voto de confianza la primera presidente deseando un verdadero cambio en la forma de gobernar para los mexicanos como una cuestión de amor.

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