Enrique Alfaro
El chiapaneco Jacob Moreno Moreno finalmente logró la justicia poética, afirma el diario Excelsior y tiene razón. Vivió la vida como un sueño y al morir solo se llevó un puño de tierra. Poco antes de fallecer bebió el trago amargo de saber que la composición más famosa que había escrito de puño y letra, le había sido plagiada y vendida a una empresa discográfica.
La letra de la emblemática canción fue escrita en 1997 bajó el título de “La vida es un sueño” y se popularizó con la interpretación del cantante Antonio Aguilar. La gente hizo suyo el corrido que pasó a ser solicitado como “Un puño de tierra”.
Poco antes de morir, en 2009, Jacob Moreno descubrió que la letra había sido registrada 16 años antes por Eduardo Antonio Baptista Lucio quién vendió los derechos a una compañía discográfica. En internet también aparecen como creadores Carlos Coral y Carlos González García, sin embargo el Instituto Nacional de Derechos de Autor reconoció este año que la autoría de la letra era del chiapaneco.
Familiares de Jacob Moreno Moreno iniciaron un litigio para recuperar los derechos y reivindicar al verdadero compositor. El sello discográfico que adquirió la obra no opuso resistencia al reconocimiento de la titularidad de “Un puño de tierra”, que en realidad se llama “La vida es un sueño”.
Entre las contundentes pruebas que la familia aportó para demostrar la autoría de la letra del corrido se incluyó el manuscrito original, además de cientos de otras composiciones con las que se pudo comparar el estilo, manejo del lenguaje y forma de adjetivar, elementos importantes para la decisión final: devolverle la titularidad al chiapaneco.
Por razones de salud, en los últimos meses he estado más sensible que de costumbre, por lo que me alegró enormemente ser informado de la anterior noticia por parte del esposo de una familiar del mencionado compositor. Él me había platicado de los esfuerzos por recuperar la autoría de la letra de la canción. Pero más que eso, por reivindicarlo como el gran compositor que fue. Quedan cerca de 400 canciones escritas en sus cuadernos. Ojalá que, tras la noticia, otros cantantes se interesen por interpretar sus composiciones.
Posdata: Hasta el presidente Andrés Manuel López Obrador mostró en una de sus conferencias mañaneras su gusto por “Un puño de tierra”. Yo, por lo pronto, vagaré por la vida sabiendo que “ya muerto voy a llevarme nomás un puño de tierra” ¡Ajúa! Sírvanme otra copa.
Puño de tierra o La vida es un sueño
Vagando paso la vida
Nomás recorriendo el mundo
Si quieren que se los diga
Yo soy un alma sin dueño
A mí no me asusta nada
Pa’ mi la vida es un sueño
Yo tomo cuando yo quiero
No miento soy muy sincero
Y soy como las gaviotas
Volando de puerto en puerto
Yo sé que la vida es corta
Al fin que también la debo
El día que yo me muera
No voy a llevarme nada
Hay que darle gusto al gusto
La vida pronto se acaba
Lo que paso en este mundo
Nomás el recuerdo queda
Ya muerto voy a llevarme
Nomás un puño de tierra
El día que yo me muera
No voy a llevarme nada
Hay que darle gusto al gusto
La vida pronto se acaba
Lo que paso en este mundo
Nomás el recuerdo queda
Ya muerto voy a llevarme
Nomás un puño de tierra