* También negó que el apoyo de Yunes se debiera a un acuerdo económico o amenazas, calificándolo como una decisión política.
El presidente Andrés Manuel López Obrador destacó la aprobación de la reforma al Poder Judicial en el Senado, subrayando la importancia de este avance legislativo, pese a que el voto decisivo provino de un miembro de la oposición. El respaldo del senador panista Miguel Ángel Yunes Márquez, conocido por su histórica rivalidad con el mandatario, resultó fundamental para que la iniciativa prosperara en la madrugada del 11 de septiembre.
La reforma, que incluye la elección popular de jueces y magistrados, ha generado un amplio debate en el país. Además, propone la reducción del número de ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y la creación de un Tribunal de Disciplina Judicial. La votación en el Senado, realizada en un ambiente tenso y con protestas en las afueras, culminó con 86 votos a favor y 41 en contra.
En la sesión, manifestantes, en su mayoría funcionarios judiciales en huelga y estudiantes, intentaron irrumpir en la sede del Senado, lo que exacerbó el clima de caos. Las autoridades lograron controlar la situación, pero el incidente dejó claro el nivel de controversia que rodea a esta reforma. A pesar de la oposición y las críticas sobre posibles afectaciones a la independencia judicial, la reforma fue aprobada y enviada a los congresos estatales para su ratificación.
López Obrador, al ser cuestionado sobre el respaldo de Yunes Márquez, reconoció que existió un diálogo entre el senador y representantes del oficialismo, pero negó que se tratara de un acuerdo económico o basado en amenazas. “Es una decisión política”, afirmó el mandatario, quien insistió en que la política muchas veces implica optar entre opciones menos deseables para lograr objetivos mayores.
El futuro político de Yunes Márquez dentro de Morena aún es incierto, ya que el presidente evitó confirmar si se le invitará formalmente a unirse al partido. Sin embargo, López Obrador subrayó que el apoyo del senador panista fue crucial para lograr la mayoría calificada necesaria para aprobar la reforma en la Cámara alta.
La reforma judicial ahora enfrenta su última etapa: la ratificación por al menos 17 congresos estatales. Con Morena al mando en 24 entidades, se espera que el proceso avance sin mayores contratiempos, aunque la controversia y las protestas en torno a estos cambios en el sistema judicial probablemente continuarán.