* En un video que circuló en redes sociales se observa cómo los jovenes son interrogados y golpeados repetidamente.
Redacción / Alfaro Noticias
En el municipio de Villaflores, Chiapas, la comunidad de La Sirena se vio envuelta en un acto de brutalidad este jueves 13 de junio, cuando aproximadamente 200 pobladores tomaron la justicia en sus manos. Retuvieron y golpearon a tres jóvenes, dos hombres y una mujer, acusados de estar implicados en el secuestro y asesinato de dos adolescentes, Jean Carlos Nucamendi Díaz y Pablo Molina Coello, de 16 y 17 años respectivamente.
Jean Carlos y Pablo fueron reportados como desaparecidos el 9 de junio y sus cuerpos desmembrados fueron encontrados dos días después cerca de un basurero en la colonia Francisco Villa. La indignación y la furia de la comunidad llevaron a la persecución y retención de los presuntos responsables, quienes fueron sometidos a golpizas y tortura física en un intento por obtener confesiones.
En un video que circuló ampliamente en redes sociales, se observa cómo la joven mujer, originaria de Escuintla, es interrogada y golpeada repetidamente mientras los pobladores la acusan. Bajo coerción y presión física, ella menciona el nombre “Caleb” como implicado en los asesinatos, aunque clama por su inocencia. Los otros dos jóvenes también sufrieron graves heridas, uno de ellos se encuentra en estado crítico debido a las lesiones recibidas.
Por otro lado, en el fraccionamiento Santa Catarina, otro joven fue asesinado con signos de tortura, incluyendo una herida profunda en la garganta, debido a su presunta implicación en el fallecimiento de los menores.
Ante la situación, la Fiscalía General del Estado de Chiapas y fuerzas de seguridad como la Guardia Nacional, la Policía Estatal y la Municipal, lanzaron un operativo especial para intentar rescatar a cinco retenidos y asegurar la paz en la región. Entre los rescatados se encontraban Jesús “N” de 19 años, Naideli “N” de 19 años, José “N” de 18 años y dos menores cuyas identidades se mantienen resguardadas. Algunos de ellos requirieron atención médica debido a los golpes recibidos por parte de los residentes antes de ser liberados.
El linchamiento ha generado una ola de condenas a nivel nacional por la violación de derechos humanos y la justicia por mano propia.