Raúl Mendoza Vera
En 1979, el cineasta Milos Forman lanzó Hair, un musical rock que narra la vida de una comuna hippie en New York durante el reclutamiento de jóvenes norteamericanos para ir a pelear a la guerra de Vietnam. El drama se centra en que los hippies conocen a un joven campirano, patriota, que quiere ir a combatir al Vietcong. A modo de convencerlo de lo contrario, lo llevan a conocer la contracultura norteamericana, que pregonaba la apertura de las puertas de la percepción por medio de alucinógenos, el sexo libre, pero fundamentalmente el discurso pacifista contra la guerra del Tío Sam. Forman recupera como centro del discurso hippiela llamada Era de Acuario, a la que, según esta perspectiva, estaríamos entrando precisamente en este 2024, que ha sido símbolo de una generación marcada por el New Age, y caracterizada por el fin de las guerras y la violencia características de la Era de Piscis.
En la nueva ERA de Chiapas, el discurso no sólo es político,sino que se basa en el concepto del jam ach´ulel, traducido al castellano como “abre tu consciencia”, que recoge saberes de los pueblos originarios de Chiapas. ¡Vaya coincidencia!,fin de la era de Piscis, (del pez) en la que la violencia ha reinado en el país y en Chiapas, e inicio de la nueva ERA.
El concepto incluyente de jam ach´ulel, fue el marco de la entrega de la constancia de mayoría como ganador del proceso electoral para gobernador de Chiapas de Eduardo Ramírez Aguilar. En este nuevo estadio en el que se llama abrir la conciencia, se ha tratado de evitar el discurso excluyente, característico de la “era del pez”; los términos clasismo, racismo, fifís, aspiracionistas y segundo piso; han sido eliminados del discurso oficial. Esto es importante en un estado donde el diálogo entre los diferentes sectores es urgente. Históricamente Chiapas ha tenido entre sus lastres el racismo, pero la apertura que se dio desde el movimiento indígena de 1994, ha venido cambiando conductas y viejas prácticas heredadas de la colonia y que al igual que el “vos” han permanecido entre nosotros por siglos.
Abrir la conciencia no es una marca electoral, es una propuesta fundada en otros dos elementos, chiapanequidad y descolonización, este último es una corriente del pensamiento latinoamericano, que ha estado en boga en la izquierda desde la década de los 90 y que se ha tratado de expandir a través de los nuevos programas de estudio. El jamach’ulel, está fundado en un discurso inclusivo que se ha venido construyendo después de muchos tropiezos a costa del rompimiento del tejido social, donde la intolerancia religiosa, política y de género ha marcado diásporas y enfrentamientos entre chiapanecos.
Con el jam ach’ulel se hace a un lado el discurso excluyente que se ha usado en el presente sexenio, donde las definiciones desarrolladas desde las ciencias sociales han servido para denostar y descalificar al que piensa diferente.
La propuesta reivindicativa de jam ach´ulel ha de acompañarse de la paz, la justicia y desarrollo económico; condiciones indispensables para que el discurso incluyente impacte en la vida diaria de los chiapanecos.